Timerman, en declaraciones formuladas en Quito en el marco de la sede de la Unasur, celebró que el segundo tramo del marco regulatorio votado esta tarde marca "el apoyo abrumador hacia la posición de Argentina y el G77", a pesar de "la enorme presión que recibieron muchos países por parte de algunos organismos internacionales".

"Estamos muy contentos porque hoy se discutió la forma en que se va a negociar el marco regulatorio a partir del 1 de enero próximo", destacó Timerman. El diplomático destacó que el objetivo es que "de una vez por todas, sean todos los países los que decidan cómo se resuelve el tema de las deudas soberanas y no solamente la justicia de un país o las decisiones a veces inentendibles de un juez".