Los damnificados, algunos encadenados, se concentraron este mediodía frente a los accesos al Palacio de Tribunales y, con pancartas y bombos, expusieron sus reclamos.

El caso que llegó al máximo tribunal de la nación involucra a unos 1.200 ex habitantes de tierras "ancestrales" que quedaron inundadas por la elevación de la cota del Río Paraná.

Según el abogado Héctor Falicoff, quien patrocina a los demandantes, "hay sentencia a favor en primera y segunda instancia", pero la condena no se puede ejecutar porque existen recursos presentados por el EBY.

También los damnificados formularon planteos ane la Corte, porque quieren que se eleven los montos de las indemnizaciones.

En las instancias inferiores los demandantes habían solicitado que se les permitiera embargar las turbinas de la represa, pero la medida (concretada sobre un edificio del EBY en la zona de Puerto Madero, de esta capital) solo fue autorizada sobre bienes que no afecten el funcionamiento de la obra.

El letrado agregó que la elevación de la cota del río causó perjuicio en una zona hasta unos 100 kilómetros al norte de Posadas, alcanzando a las localidades de Garupá, Santa Ana, Candelaria y San Ignacio, entre otras.