El funcionario paceño indicó que la solución considera una articulación jurídica especial para evitar que una oposición de Perú derrumbe el pacto, al señalar que "no hay que pensar en soberanías decimonónicas", informó la agencia italiana ANSA.

Hasta ahora, las negociaciones entre La Paz y Santiago fracasaron históricamente por la oposición de Perú a que Bolivia acceda al Pacífico por un corredor soberano por la frontera chileno-peruana, aunque la diplomacia limeña anticipó que no será un obstáculo ante un eventual acuerdo.

La prerrogativa de Perú para oponerse a un pacto de este tipo se basa en el tratado fronterizo que este país firmó con Chile en 1929 y que otorga a Lima un derecho a veto.

Finot anticipó que la histórica hoja de ruta buscará dar inicio a un camino "serio y constante de integración", el que incluirá el tema energético y la reanudación de relaciones diplomáticas a nivel de embajadores, interrumpidas desde 1978.

"El corredor (debe entenderse y diseñarse) como un factor de integración, que integre el occidente boliviano, el norte chileno y el sur peruano", sostuvo, y entendió que "no hay salida posible que no contemple el interés de Chile y Bolivia".

El cónsul boliviano añadió que la hoja de ruta del acuerdo que debería sellarse a mediados de 2008 considerará una serie de pasos, que deberían desembocar en referéndum en Chile y Bolivia, que ratifiquen el acuerdo político.

Por ello, llamó a trabajar con más énfasis en la formación de una opinión pública que acompañe este proceso y resaltó los acercamientos diplomáticos y militares de los últimos ocho años.