Todos los días camino al trabajo debo ser testigo sobre la calle Zapiola, entre los arroyos Santo Domingo y Las Piedras (Bernal Oeste), del repugnante espectáculo que da la cantidad de basura que allí se arroja. Ahora, después de las lluvias, se suma una cantidad de agua estancada, fuente de infecciones, mosquitos y mal olor. Se nota que el intendente nunca hace ese recorrido porque el panorama sería distinto entonces. Me pregunto ¿por qué todos vemos esto y las autoridades pertinentes no? ¿O será que las buenas obras sólo se hacen en vísperas de elecciones (como siempre)?

Rosana Lavore

D.N.I. Nº 14.283.179