Con muy poco público en el Monumental, River arrancó bien, con Buonanotte enchufado y casi se pone en ventaja a los 4 minutos, cuando el chiquitín estrelló un remate en el travesaño. Pero Estudiantes se esforzó para pasar el mal momento y cuando logró nivelar el trámite, se puso en ventaja con un golazo de Calderón, que unos minutos antes ya había dicho presente. El veterano del Pincha le ganó la posición en el área a Nicolás Sánchez, le amagó al arquero Vega y la definió con un toque de zurda contra el palo del arquero: la pelota se metió fina, rozando el caño. Y poco después estuvo cerca de ampliar el uruguayo Salgueiro con un remate cruzado desde la puerta del área, pero esta vez Vega respondió enviando al corner. River tenía buenas intenciones, pero no llegaba a concretarlas.

Si River había terminado golpeado el primer tiempo, la situación se agravó en el complementario cuando en el comienzo, Sánchez Prete ejecutó con maestría un tiro libre en el que Vega se vio forzado a dar rebote y Rojo lo terminó de empujar a la red para el 2-0. Pero el equipo de Gorosito no quería darse por vencido así nomás. Y ajustó clavijas para ir a buscar el descuento. Lo tuvo dos veces en una jugada increíble. Primero Ferrari estrelló otra pelota en el travesaño del arco de Albil y el rebote le quedó servido a Mauro Díaz que remató con tanta mala suerte que su disparo se estrelló contra el palo derecho del arquero de Estudiantes.

Con un remate estupendo de Buonanotte, el mejor entre los de Gorosito, River logró descontar: fue un zurdazo cruzado que pegó en el palo derecho de Albil y se metió adentro. Los últimos minutos River buscó con insistencia el empate y el partido se abrió y ganó en emotividad, pero Estudiantes, con el mismo carácter que los titulares muestran en la Copa Libertadores, aguantó bien atrás y hasta pudo ampliar de contraataque.