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All Boys y Tigre se repartieron errores y aciertos en la misma proporción y por eso la igualdad 3-3, en Floresta, fue justa, en un intenso y emotivo encuentro en el que la lucha por la permanencia en la máxima categoría está en el horizonte de ambos.

El conjunto de Victoria siempre se mantuvo adelante en el marcador, pero el local supo aprovechar las desinteligencias de los dirigidos por Ricardo Caruso Lombardi a la hora de defender y logró empatar en tres oportunidades para llegar a un final emocionante.

Las dos conquistas de Esteban González, alguien no habituado al gol, y el restante a cargo de Denis Stracqualursi, pusieron tres veces a Tigre en ventaja. Sin embargo, desde atrás, el local llegó siempre al empate por las anotaciones de Sebastián Grazzini, en dos ocasiones, uno en cada segmento, y Mauro Matos, su máximo artillero, en el complemento.

La lluvia de goles se dio en un partido en el que Tigre manejó mucho mejor la pelota y estuvo siempre en ganancia, pero cometió errores que pagó demasiado caros. Los de Victoria no entendieron cómo defender el triunfo y terminaron regalando dos puntos ante un elenco que no supo imponer autoridad en su casa.

El mérito de All Boys estuvo en su insistencia y en la gran actuación de Grazzini, que anotó dos golazos: el primero al aprovechar un error de Ardente y definir por arriba, y el segundo con un violento zurdazo, luego de recibir una asistencia de Rimoldi.