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Desde Santa Rosa

Matías Rossi, el patrón del momento en el SúperTC2000, y su compañero en el equipo Toyota, Mariano Werner, son los protagonistas de un duelo especial. Porque no hay peor rival que dos compañeros que se quieren vencer uno a otro manejando autos similares, porque hoy se enfrentarán en el Super8 que inaugura la cuarta fecha del año de la categoría, aquí en La Pampa, y porque la tensión entre ambos es innegable, especialmente a propósito de lo que sucede en el Turismo Carretera, en donde Rossi corre con Chevrolet y Werner lo hace con Ford.

Rossi fue inalcanzable ayer en Santa Rosa, corriendo a más de 200 km/h de promedio (“llegué a los 270, 271 km/h de máxima”, aseguró), marcó la pole position a 201,664 km/h, sacó casi medio segundo de ventaja, pero a la hora de los agradecimientos posteriores evitó mencionar a Werner, que terminó octavo en la clasificación y, por lo tanto, será su primer rival en el Super8 a las 9.50 (televisa Canal 13 desde las 11).

El entrerriano había sido sancionado el viernes por la ACTC a raíz de una grave infracción reglamentaria cometida por el equipo para el que compite en TC, el Lincoln Sport Group, y deberá largar último en las próximas cuatro carreras: es el puntero del campeonato, pero se verá netamente perjudicado. En su descargo, ayer acusó a sus colegas: “Me sancionaron por pedido de otros pilotos, ellos llamaron a la ACTC para que nos sacaran puntos. Fueron varios; no encontré solidaridad, y a partir de ahora voy a actuar de la misma manera. Son egoístas y no entienden que esto es un deporte. Ojalá algún día les pase algo parecido para que se den cuenta de lo que se siente”.

Werner pareció aludir a Rossi, al que dos semanas antes, en la última carrera de TC, había tachado de “vocero de los pilotos”. “No soy vocero de nadie –se defendió ayer el líder del torneo del SúperTC2000–, sólo dije lo que pensaba en ese momento, y muchos pilotos me respaldaron luego.” Con respecto a la acusación, fue más escueto: “No me doy por aludido”. Otros pilotos contraatacaron: “Si Werner sabe quiénes fueron los que llamaron, que dé los nombres”, le reclamó Christian Ledesma.

“No estoy de acuerdo con la sanción que le impusieron –agregó Rossi–- porque él no es dueño del equipo y no sabe lo que hacen al auto. Es un perjuicio importante, aunque creo que sigue siendo el principal candidato en el TC. ¿Cómo vamos a correr el Super8? Supongo que Werner va a intentar ganarme”. dice, llamándolo por el apellido –no por el nombre, como es habitual– para subrayar la distancia. “En el equipo corremos con libertad y sin chocarnos”, dijo, marcando la cancha. “A Matías no sé si lo alcanzo”, repuso el entrerriano, que fue más de un segundo más lento que su compañero. Cuando la carrera de SuperTC2000, a 25 vueltas, se largue a las 13, acaso buena parte de los fuegos artificiales ya se hayan lanzado. Quizá Werner ya no sea rival de Rossi. ¿Volverá a intentarlo Pechito López? “Esta vez me ganó bien y me la banco”, dijo ayer el cordobés tras la clasificación. No está en la misma liga, parece. En la pista, por ahora, nadie está en la misma liga que Rossi.