El debut de Gimnasia en la Copa Sudamericana se dio de una manera auspiciosa. Porque a pesar de que Fluminense alcanzó el empate en el tiempo de descuento, el resultado y el gol de visitante dejan al equipo dirigido por Pedro Troglio con buenas expectativas para el partido de vuelta, en La Plata. Herner fue el encargado de poner en ventaja al visitante, que terminó con un jugador menos por la expulsión de Cabrera. Pero cuando faltaba poco para el final, Pitbull, de tiro libre, decretó la igualdad.

De entrada, Gimnasia apostó por jugar lejos de su arco. Y lo logró durante casi toda la primera mitad porque Fluminense, muy impreciso en los pases, apenas inquietó a Olave. Evando fue el primero en generar peligro, pero su remate salió desviado por encima del travesaño. Hasta ahí el trámite del partido era claro: el local chocando contra su propia impotencia y un Gimnasia que se conformaba con el resultado. Porque, a pesar de que los brasileños casi no atacaban, al equipo argentino le costaba manejar la pelota. Cabrera fue el jugador que más oxígeno le daba a Gimnasia con sus continuas subidas por la franja derecha. Aunque, al no poder asociarse con Guglielminpietro y Silva, sus buenas intenciones se desvanecían al llegar al área rival.

Nada pareció cambiar en el segundo tiempo. Marcelo probó desde 30 metros y su remate se fue desviado. De a poco, Gimnasia comenzó a retrasarse y a darle la iniciativa al local. Fluminense era quien manejaba la pelota, pero no lastimaba. A los 15 minutos los brasileños protagonizaron una de las jugadas más claras del partido: Pitbull se escapó por la derecha, se enfrentó a Olave y ensayó un potente derechazo cruzado que salió a centímetros del palo. Al igual que en la primera mitad, Cabrera era el jugador más desequilibrante del visitante. Pero en el momento de mayor incertidumbre, Gimnasia comenzó a inquietar a Diego. Primero fue Cuevas quien pudo anotar el primer tanto, pero Roger desvió su remate a dos metros de la línea. A la jugada siguiente llegó el gol: Cabrera envió un centro que Herner conectó con un preciso cabezazo. Fluminense arrinconó a Gimnasia en los últimos minutos. Rogerio lanzó un tiro libre que pegó en el travesaño y Juninho, en la jugada siguiente, obligó a una buena reacción de Olave. Pero cuando Gimnasia arañaba la victoria, Pitbull ejecutó un preciso tiro libre que se incrustó en el ángulo y decretó la igualdad.