Las principales bolsas de Europa y Asia cerraron ayer a la baja, tras el anuncio de la quiebra de un fondo de inversión estadounidense. París cayó 1,42 por ciento, Londres el 1,45, Francfort 1,50, Hong Kong 4,79 y Tokio 3,33. En tanto, la Bolsa de Wall Street logró recuperarse tras abrir en baja y perder durante la jornada 200 puntos. Un informe de Standard & Poor’s indicando que el “fin de la crisis está cerca” pareció calmar los ánimos de la principal economía del mundo. Sin embargo, el dólar sigue perdiendo frente al euro, lo que hace que los inversores se vuelquen a los commodities: las cotizaciones del petróleo cerraron por primera vez en los 110,33 dólares y el oro rozó los 1000 dólares. En Argentina, el euro cerró en 5 pesos mientras que la Bolsa de Buenos Aires registró un avance de 0,73 por ciento, con el índice líder MerVal cerrando en 2149,91 puntos.

El nerviosismo en la jornada de ayer se propagó a todas las plazas financieras del mundo después de que el fondo Carlyle Capital Corporation (CCC), que cotiza en Amsterdam, anunciara su incapacidad de hallar un acuerdo con sus acreedores, lo cual podría desembocar en una liquidación. Las bolsas europeas y asiáticas cerraron a la baja: Hong Kong cayó 4,79 por ciento, Tokio 3,33 y Shanghai 2,43. Diferentes economistas consultados por Página/12 coincidieron en que estos movimientos en las bolsas mundiales están relacionados con un descenso del dólar frente al euro, que a su vez repercute tanto en el precio del petróleo como en el del oro.

La moneda europea tocó un nuevo máximo y cerró en 1,56 dólar. “El movimiento del euro es la respuesta a la percepción sobre las continuas bajas de la tasa de interés en Estados Unidos y el mantenimiento de la europea. El crecimiento del euro tiene algo de burbuja especulativa, como suelen darse cada tanto, como con la caída del Nasdaq en 2001”, graficó a Página/12 Miguel Kiguel, director de Ecoviews. Esta burbuja se traslada, como indica el economista Raúl Ochoa, al mercado de los commodities, que también “pueden considerarse parte de una rueda especulativa”.

Frente a la caída del valor del dólar, los inversores corren a refugiarse en las materias primas. “Salen del Real State para invertir en commodities, ya sea oro, petróleo o el sector agrícola”, graficó a este diario Mariano Lamothe, economista de la consultora Abeceb.com. El barril de crudo cerró ayer por primera vez en su historia en 110,33 dólares en Nueva York –durante la jornada alcanzó los 111 dólares–, mientras que el oro llegó a tocar fugazmente los 1000 dólares y cerró en 994 la onza. “El problema para Estados Unidos no es tanto el dólar o el oro, sino cómo superará su crisis financiera. Los bancos todavía no limpiaron sus balances. Como consecuencia de esta situación, no dan crédito, lo que repercute en sus niveles de crecimiento”, indicó Kiguel.

En Argentina, las idas y vueltas de los mercados mundiales se sintió en la cotización del euro, que llegó a los cinco pesos. “Si mantengo el tipo de cambio pero el dólar se sigue devaluando frente al euro, esto provoca que el peso sea más competitivo para los países del Viejo Continente. Es decir, resulta más barato para los europeos invertir en Argentina”, indicó Lamothe. Por otro lado, en las casas de cambio el dólar se mantuvo en 3,14 pesos para la compra y 3,17 para la venta. El dólar mayorista sigue bajo la presión por la liquidación de los exportadores que obligó al Banco Central a mantenerse activo para defender el tipo de cambio. Más allá de esta intervención, el Central ya acumuló más de 50.000 millones de dólares.

A su vez, la Bolsa de Buenos Aires registró un avance de 0,73 por ciento, con el índice líder MerVal cerrando en 2149,91 puntos. La Bolsa tuvo durante la jornada un volumen de operaciones de 125 millones de pesos (39,4 millones de dólares). Se registraron 29 alzas, 37 bajas y 11 papeles cerraron sin cambios. Y en el Mercado a Término de Buenos Aires, luego de conocerse la suba de las retenciones para la soja, su cotización bajó cinco dólares y cerró en 285 dólares. En tanto el girasol bajó 9 dólares y cerró en 361 dólares, mientras que el trigo continúa subiendo y cotizó 215,5 dólares la tonelada.