A medida que se profundiza la crisis financiera global, el foco de atención en económica doméstica se traslada de los aumentos de precios y la intervención del Indec, a la evolución del dólar. La cotización de la moneda sube de a pequeños pasos y ayer se ubicó en 3,24 pesos, un centavo por encima del cierre anterior. La inefectividad de las políticas impulsadas por las autoridades de Estados Unidos y la fuerte devaluación que experimenta Brasil, presionan al alza la demanda de dólares que requiere una mayor intervención del Banco Central, que acompaña la evolución en su política de administración del tipo de cambio. Desde algunos sectores industriales y la Mesa de Enlace reclaman un mayor tipo de cambio “para no perder competitividad”, pero para la conducción de la autoridad monetaria realizar devaluaciones bruscas no es una opción. En este escenario, en el gobierno reconocen que el dólar podría llegar a 3,30 pesos. Por su parte, el índice Merval cayó 1,8 por ciento, en sintonía con el resto de las bolsas del mundo, y los bonos cerraron en su mayoría en baja.

Según detallaron desde el BC, el saldo de las operaciones en el mercado de contado implicó el desembolso de 60 millones de dólares. Sin embargo, tras la intervención las reservas internacionales subieron 11 millones, hasta los 47.022 millones de dólares. En la autoridad monetaria explicaron que “esta situación se debió a la revaluación del oro y algunas monedas que componen la cartera del Banco”. Pero para los operadores de la city la cifra fue mayor, oscilando entre 150 y 300 millones de dólares. Allegados a Martín Redrado negaron que se hubiera utilizado esa cantidad de reservas, pero reconocen que los inversores están demandando cada vez más. El volumen negociado en el mercado cambiario fue de 884 millones de dólares, contra los 607 registrados el martes.

Para el economista de la UBA Mariano Borzel, el escenario actual le presenta al Gobierno “la disyuntiva de no perder competitividad con el real y no presionar sobre la inflación. Pero seguir a Brasil no tiene ningún sentido, no podemos saber si la devaluación es permanente o transitoria, están saliendo muchos capitales especulativos, pero puede llegar a revertirse”. Ayer, el dólar trepó cerca de los 2,50 reales y con una fuerte inyección de divisas el Banco Central de Brasil logró apaciguarlo (ver aparte). Finalmente el dólar cerró a 2,28 reales, por debajo del cierre anterior. “Argentina no puede experimentar una devaluación como la brasileña, no se puede seguir ese grado de volatilidad”, señalaban desde la entidad que preside Redrado. Frente al desconocimiento sobre la evolución de la moneda brasileña, desde el Banco Central consideran que “lo mejor que se puede hacer por la producción es preservar la estabilidad del tipo de cambio, tenemos que garantizar todos los colchones de liquidez”.

En el segmento mayorista, donde operan bancos y grandes inversores, la divisa también se reacomodó arriba y terminó la jornada a 3,223 pesos. En el mercado de futuros la intervención del Central alcanzó los 150 millones de dólares. Los compromisos que vencen a fin de mes quedaron por debajo del precio de contado a 3,230 pesos y para noviembre se ofreció a 3,258, mientras que la última posición del año se negoció a 3,280.

El recorte de tasas coordinado entre los principales bancos centrales del mundo no alcanzó para impulsar los mercados accionarios y la bolsa porteña acompañó la tendencia mundial perdiendo 1,8 por ciento. El volumen de operaciones fue de 105 millones de pesos y el índice líder bajó hasta 1359 puntos. Las pérdidas se volvieron a concentrar en las acciones financieras y petroleras. Las dos empresas con mayor ponderación del Merval, Tenaris y Petrobras, bajaron 1,8 y 0,2 por ciento respectivamente. El Grupo Financiero Galicia perdió 6,2 por ciento, el Banco Francés cayó 3,9 por ciento, y el Banco Macro avanzó 1,9 por ciento.

En tanto, en renta fija continuó el desarme de posiciones y los bonos cerraron en baja. El discount en moneda local cayó 4,4 por ciento, así el título de deuda más líquido llegó a su valor mínimo del año al cerrar en 81 pesos. Por su parte, el Cupón PIB recuperó 5,5 por ciento.