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El secretario de Política Económica, Axel Kicillof, destacó el rol de las políticas de estímulo a la demanda agregada desplegadas durante el primer semestre por el Gobierno en la reciente recuperación de la actividad. Durante su exposición en el seminario organizado por el Cefidar, el funcionario se encargó de evaluar los resultados del modelo macroeconómico entre 2003 y 2012. El repunte que muestran algunos sectores industriales –como el automotriz– y la construcción, uno vinculado con el sector externo y el otro con la dinámica interna, evidencian para el viceministro de Economía una reactivación. En ese proceso, explicó Kicillof, las políticas de ingresos y las líneas de crédito creadas por el Estado juegan un rol central para impulsar la actividad en un escenario de crisis internacional y tensiones internas.

A continuación, Página/12 reproduce algunos de los puntos salientes de la extensa presentación que el funcionario no alcanzó a exhibir en el Salón de Actos del Banco Nación, pero a la que accedió este diario:

- Crecimiento inducido: En un escenario donde el crecimiento global evidencia una desaceleración durante los primeros cinco meses de 2013, la economía creció 4,9 por ciento. El 31 por ciento de esa expansión –1,5 puntos porcentuales– se explican por las políticas desplegadas por el Gobierno. El PIB se expandió a un ritmo promedio anual entre 1991 y 2002, mientras que creció un 7,2 por ciento promedio entre 2003 y 2012. Ese ritmo de crecimiento es el más elevado en la historia argentina.

- Políticas de ingreso: El incremento en el gasto público que generaron la movilidad jubilatoria, la AUH y las asignaciones familiares, el Pro.Cre.Ar y las transferencias a provincias y municipios ascienden a 42.405 millones de pesos. Para Política Económica, esos desembolsos crearon –directa o indirectamente– 44.848 puestos de trabajo en el semestre.

- Pro.Cre.Ar: En la actualidad hay 65.787 viviendas en proceso de construcción. En abril y mayo la construcción volvió a crecer y, según estiman en Política Económica, el 67 por ciento del crecimiento de los despachos de cemento del primer semestre del año estuvo explicado por el programa de créditos hipotecarios.

- Expansión del crédito: El conjunto de los programas de financiamiento al sector productivo pasaron de representar el 0,9 por ciento del PIB en 2009 a 3 por ciento en la actualidad. La reforma de la Carta Orgánica del BCRA permitió instrumentar la Línea de Crédito para la Inversión Productiva (LCIP). A través de esa herramienta, la autoridad monetaria obligó a los bancos a presentar el equivalente al 5 por ciento de sus depósitos para financiar inversiones. Los créditos tienen un plazo mínimo de tres años y una tasa de 15,25 por ciento. Hasta el momento se desembolsaron 28 mil millones de pesos. Desde su aplicación, la LCIP explica el 45 por ciento del aumento del crédito a largo plazo.

- Inversión pública en energía: Entre 2002 y 2012, la inversión pública generó el 77 por ciento de la nueva oferta eléctrica.