El Ministerio de Economía y el Banco Central desmintieron ayer en sendos comunicados las versiones periodísticas que daban cuenta de una supuesta recomendación oficial para que importadores adquieran los dólares a través del mercado bursátil. “Tal información carece de asidero por el orden legal vigente en el país, así como también por la falta de una fundamentación técnica”, aseguró el presidente del Banco Central, Juan Carlos Fábrega. La entidad monetaria recordó que el único canal legal para efectuar operaciones de cambio, tanto para ingresos como para egresos, es el “mercado cambiario vigente”. La publicación sentenciaba que a partir del lunes próximo los importadores recurrirían al mercado paralelo ante la imposibilidad de conseguir las divisas en el Central. La noticia generó un fuerte revuelo entre los pequeños importadores. “Hubo que calmar a uno por uno, pero el daño de esta operación ya estaba hecho”, señaló a este diario el titular de la Asociación de Pequeñas y Medianas Empresas (Apyme), Eduardo Fernández. Sobre la especulación de este supuesto desdoblamiento cambiario, las cuevas llevaron el dólar blue hasta los 15,95 pesos.

En las últimas semanas, el precio implícito que surge de convertir pesos en dólares a través de la compraventa de títulos públicos y acciones se disparó a máximos históricos. Esta cotización se ubica actualmente en torno de los 14,50 pesos. Entre los posibles compradores que se habrían sumado a la operatoria, desde el mercado se apuntó a los importadores, que comenzaban a utilizar este canal para conseguir moneda extranjera ante las restricciones oficiales para acceder a las divisas. La caída en el stock de reservas, principal preocupación atendida por Fábrega, busca ser morigerada con un mayor control de las ventas de divisas, aunque en las últimas horas el organismo haya tenido que flexibilizarlo para automotrices y electrónicas de Tierra del Fuego. La operación para los importadores requiere de la presentación de una Declaración Jurada Anticipada de Importación (DJAI). Por su parte, desde el Central comenzaron a “administrar” las autorizaciones para la compra de divisas para evitar una mayor erosión de las reservas. A principio de mes se redujo de 300 mil a 150 mil dólares el mínimo para comprar las divisas sin informarlo previamente.

En las últimas horas se esgrimió además que Economía se había comunicado con los importadores para informarles que deberían recurrir al mercado mediante contado con liquidación para la compra de dólares. Para el sector fue un baldazo de agua fría: importar a un 40 por ciento más caro, independientemente de la posibilidad de trasladarlo al precio de venta, haría inviable el negocio. “Recibimos desde temprano llamados de pequeños importadores y de empresarios que compran en el exterior algún insumo clave alarmados por el trascendido. Por eso se decidió emitir un comunicado”, señalaron a este diario desde el Central. En el comunicado se sostiene que “toda operación de cambio, o sea el intercambio de moneda local por moneda extranjera o viceversa, debe realizarse en el mercado de cambios a través de una entidad autorizada a operar a tal efecto, acorde a la normativa aplicable”. Por su parte, Economía desmintió “categóricamente” que se haya instruido formal o informalmente a importadores a realizar operaciones de cambio vinculadas con transacciones de comercio exterior en mercados alternativos.

La desmentida también se hizo eco en el sector privado. “Cuando se viraliza este tipo de versiones, los que ganan son siempre los mismos, los importadores y empresarios grandes, quienes buscan generar malestar”, dijo el titular de Apyme a Página/12. “Desde temprano nos comunicamos con nuestros asociados y con los de Aiera (Asociación de Importadores y Exportadores de la República Argentina) para tranquilizarlos uno por uno”, sostuvo Fernández. No fue el único que tomó el teléfono para aquietar las aguas. Según afirmó el vocero de la Cámara de Importadores (CIRA), Miguel Ponce, el propio titular del BCRA se comunicó con la entidad para llevar calma. “Decí que hablaste con el titular del Banco Central y que te ratificó que normativamente es imposible que las importaciones no sean canalizadas por el Mercado Unico y Libre de Cambios”, relató el empresario importador.

“Hay mucho de fantasía en esto. No todo el mundo puede usar este mercado (paralelo) ni le es conveniente”, señaló Fernández. Para pagar una importación en el exterior, se debe realizar mediante el sistema bancario e informar el origen de los fondos. Si bien es cierto que el contado con liqui incluye que los fondos se depositen en una cuenta en el exterior, cuyo destino podría ser la de un exportador, para ingresar la mercadería también debe informarse el modo de pago. “Nadie paga una importación en la mano”, agrega el titular de Apyme, por lo que sólo es posible este tipo de mecanismos alternativos en caso de compras puntuales en el país a un intermediario que tenga el producto o el insumo en stock. Por último, el Ministerio de Economía señaló que el objetivo de las DJAI es facilitar la gestión de los trámites y del riesgo aduanero, para brindar previsibilidad al comercio exterior.