EL MUNDO
Seguimos bajo fuego
Dos soldados estadounidenses murieron ayer en Bagdad en incidentes armados, informó el Comando Central estadounidense (Centcom). El primer soldado, que dirigía el tráfico en un puente de la capital iraquí, murió cuando un desconocido a cara descubierta se le acercó y le disparó con una pistola. El Centcom pidió “el apoyo de la población local” para encontrar al agresor e informó que la víctima integraba el 2ª Regimiento de Caballería Acorazada. El otro soldado estadounidense, de la 3ª División de Infantería, recibió un balazo en la cabeza de un francotirador. Murió en el acto. El jefe del Centcom, el general Tommy Franks, dio ayer una reunión informativa a miembros del Senado norteamericano. Allí dijo que “mi expectativa es que en Irak veremos una actitud dura en el futuro”.