EL MUNDO
Familiares y Madres argentinas
Por L. B.
Durante los días en que se desarrolló el encuentro internacional en La Habana, se organizó la Asociación de familiares de las víctimas del avión de Barbados –que fue destruido en vuelo en un atentado en 1976– y por el cual estaba siendo juzgado Luis Posada Carriles cuando se fugó de Venezuela.
De la misma manera desfilaron en el encuentro representantes de las Madres, Nora Cortiñas y Hebe de Bonafini, que fue abrazada por Fidel Castro al terminar su discurso. Dio su testimonio Manuel Guerrero, de la Asociación de ex menores torturados por la dictadura de Pinochet, se denunciaron las torturas y desapariciones de las que es responsable Posada Carriles cuando actuó como alto oficial de la Disip venezolana, en los años ’60. Y de la misma manera se denunciaron las matanzas y violaciones a los derechos humanos en Centroamérica, cuando Posada Carriles integró el grupo de asesores en la base aérea de Ilopango, junto a otros cubano-americanos protegidos por el gobierno norteamericano. El padre de Fabio Di Celmo, Giustino, recordó que su hijo murió a causa de un bombazo en el Hotel Copacabana, en 1977, en una ola de atentados organizada por Posada Carriles y otros cubano-americanos residentes en Miami.
Mientras Posada Carriles es protegido por el gobierno norteamericano, en Estados Unidos se aplicaron condenas exageradas a cinco cubanos que investigaban en ese país las actividades de estos grupos terroristas. A estos cinco cubanos, que no realizaron atentados ni se infiltraron en instituciones norteamericanas, ni pusieron en peligro la seguridad de ese país, ni mataron a nadie, se les aplicaron condenas perpetuas dobles, se los encerró en cárceles separadas y no se les permite ser visitados por sus familiares. Aquí en Cuba son considerados héroes y la hija de uno de ellos, que no ve a su padre desde hace varios años, fue aplaudida de pie y abrazada por los familiares de víctimas en la última sesión del encuentro.