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Cuba parece tranquila. La enfermedad de Fidel Castro les preocupa a sus fieles seguidores, pero no les quita el sueño. Tienen una enorme confianza en la medicina cubana y esperanzas de que su líder se va a curar pronto. Consideran que las cosas no van a cambiar con Raúl Castro al frente del país, pero están listos para lo que venga, dijo Maritza López, coordinadora del Centro Memorial Dr. Martin Luther King Jr., en diálogo telefónico con Página/12. “La política no la hace una sola persona, sino todo el Partido Comunista Cubano (PCC)”, señaló la trabajadora social que es experta en educación popular en La Lija, en las afueras de La Habana. “Nosotros tenemos confianza en nuestro Comandante”, agregó, refiriéndose a Raúl.

–¿Cuál fue su sensación al escuchar la proclama del lunes por la noche, anunciando la enfermedad de Fidel Castro?

–Esperábamos cualquier cosa menos eso. La noticia nos sorprendió bastante. Vi el anuncio a través de la televisión cubana. No siempre miro la televisión por la noche, pero ese día los vecinos habían avisado que iba a haber una proclama. Cuando eso sucede, se para todo el país. Nos produjo mucha tristeza y una gran preocupación por la salud de nuestro líder.

–¿Qué expectativas tienen los cubanos?

–Tenemos mucha confianza en la medicina cubana y esperanzas de que el Comandante se va a curar. El primer deseo es que se cure pronto y, si eso no sucede, nos mantendremos lo más unidos que podamos. Tenemos que estar preparados para lo peor: para los oportunistas que tenemos aquí en Cuba, para los oportunistas cubanos en Miami y para lo que haga el gobierno de Estados Unidos.

–¿Qué esperan del gobierno norteamericano?

–Ellos han mantenido la misma postura hipócrita de siempre. ¿Qué más pueden hacer que no hayan hecho en todos estos años? Esperamos cualquier cosa de ellos, pero estamos preparados para lo que sea.

–¿Les causaron algún efecto los festejos de los disidentes de Miami?

–Si a ellos los hace felices, que lo disfruten, pero se han adelantado demasiado en salir a festejar. Además, es lamentable que hayan festejado, ya que más allá de las diferencias ideológicas, Fidel Castro es un ser humano. Yo no le desearía la muerte a nadie, ni festejaría una enfermedad. Lo que debe quedar claro es que no celebró todo Miami: los medios norteamericanos no difunden a los que se manifestaron a favor del Comandante.

–¿Cree que va a cambiar la situación con Raúl Castro al frente del país?

–El Partido Comunista Cubano no es Fidel o Raúl Castro solos. La línea del partido no la establece una sola persona, sino que éste está constituido por miles de personas. Eso es algo que las personas de afuera de Cuba no comprenden.

Reportaje: Virginia Scardamaglia.