Uno es corpulento y el otro más bien bajo. Sentados a una misma mesa hacen pensar en aquellas duplas desparejas de las películas de acción norteamericanas. Se conocen desde hace tiempo: la mejor prueba es el saludo amigable que se prodigan en la mesa del bar de la librería Gandhi. Ambos cargan con un sobrenombre que ya es marca registrada dentro del kirchnerismo. Jorge Ceballos es el Huevo. Fernando Navarro, el Chino. Ceballos es subsecretario de Capacitación del Ministerio de Desarrollo Social. Navarro es diputado bonaerense del Frente para la Victoria (FPV). Ceballos también es dirigente de Libres del Sur, hasta hace poco fue el coordinador de Barrios de Pie. Navarro forma parte del Movimiento Evita. Rodeados por pinturas de temática tanguera, mientras a un costado desfilan chicas solas con aire intelectual que van a mirar libros o CD, ambos se concentran en lo que es el objetivo central de esta nota. Por pedido de PáginaI12, Ceballos y Navarro han accedido a debatir en público sobre el rol de Néstor Kirchner como presidente del Partido Justicialista. Y en ese punto, por si hace falta aclararlo, no están para nada de acuerdo.

La discusión no es fortuita ni casual: viene precedida por rumores sobre un posible alejamiento de Libres del Sur de las filas del kirchnerismo. Incluso se menciona que Ceballos podría postularse como candidato a diputado en una lista autónoma. El funcionario de Alicia Kirchner parece avalar esas versiones. Navarro no desconoce los rumores, intenta impedir que se concreten. “Es doloroso que los compañeros de Libres del Sur se alejen. El alejamiento debilita al FPV y beneficia a los grupos económicos y la derecha, que quieren una nación al servicio de los poderosos”, advierte. Ceballos lo escucha sin hacer gestos. Espera su turno. “Por más que tengamos diferencias en la construcción de la fuerza política, eso bajo ningún aspecto significa que seamos opositores. No lo somos. Hemos compartido mayoritariamente la gestión de este gobierno.”

La charla se extiende por más de dos horas e incluye bromas y anécdotas de la vida sentimental. Cuando el diálogo se pone serio, surgen diferencias de análisis, de interpretación. También hay coincidencias, que parecen fundamentales. Sobre todo al hablar de la crisis global y las medidas que se deberían impulsar desde la Rosada. Sin embargo, los acuerdos programáticos se diluyen cuando se les pregunta por las elecciones legislativas de 2009. Ya es vox populi que el propio Kirchner está evaluando presentarse como primer candidato a diputado del oficialismo por la provincia de Buenos Aires.

–¿Apoyarían la candidatura de Kirchner en 2009? –pregunta PáginaI12.

Ceballos: –Nosotros apoyamos un proyecto. Siempre lo hemos tenido claro. Nos sentimos parte muy enraizadamente de la resistencia al modelo neoliberal. Fuimos parte de lo que lo puso en crisis. En el 2003, Néstor Kirchner tuvo el gran mérito de saber leer esa situación e interpretar las demandas de la sociedad. Por eso nos sentimos parte de ese proyecto. Ahora, si Néstor Kirchner es candidato de un proyecto hegemonizado por el PJ, por la liga de intendentes, no lo vamos a acompañar.

Navarro: –Hace dos meses, con Emilio Pérsico le dijimos a Kirchner que tenía que ser el candidato. Así garantizaba mayor pluralismo en el FPV, que debe contener al PJ pero también ser multicolor. Hoy, con la crisis, es indispensable que un hombre que ha probado ser un piloto de tormentas sea el candidato. Con el riesgo que eso implica, porque va a nacionalizar la elección. La sociedad debe decidir si se va a impulsar un modelo que profundice la distribución de la riqueza y de poder a los humildes, o si prefiere una nación subordinada a los números de la economía.

–¿Qué significa que Kirchner haya decidido ser presidente del PJ?

Navarro: –El peronismo ha conformado para bien o para mal la expresión cultural más importante de los argentinos. Es la fuerza política más importante, con cierto anclaje social, porque no es el mismo de los ’80 y los ’70. La expresión formal del peronismo es el PJ; su deformación, el pejotismo. Con eso no alcanza pero tampoco se puede transformar sin el peronismo. Me parece correcto que Kirchner presida el PJ. Es una garantía para que el FPV sea participativo. El FPV sigue siendo la alternativa más apta electoralmente para disputar la renta a favor de los humildes. ¿Cuál es la herramienta alternativa? No veo otra. Que me digan cuál es.

Ceballos: –Que Kirchner haya aceptado presidir el PJ fue el error más importante que cometió. Y lo hizo con una actitud defensiva. En el inicio de su gestión, Kirchner había esquivado el convite de presidir el PJ que le formulaba Duhalde. Kirchner asumió con menos votos que desocupación y comenzó a gobernar sin el apoyo del PJ y sin la CGT. Se hizo fuerte convocando a toda la sociedad. Esa era la mística de Kirchner de los primeros años. Kirchner llega a la presidencia del PJ sin haber podido construir una fuerza propia. Yo soy de los que piensan que un proceso de transformación debe apoyarse en una fuerza de transformación.

Navarro: –El tema es más complejo. El peronismo tiene sus logros y claudicaciones, todos nos debemos una autocrítica por los ’90 y la destrucción del Estado. Pero Cavallo fue ministro del peronismo derechizado pero también de la UCR aliada con progresistas. Lo más grave del neoliberalismo fue que tuvo consenso social. Que Kirchner conduzca un PJ con estas contradicciones sirve para construir el FPV. Estamos seguros de que con el PJ no alcanza. Pero debemos ver nuestras responsabilidades. Declamamos unidad pero no la practicamos. No es el momento de debilitar al FPV. No es bueno quitarle sustancia, perder valiosos compañeros.