La resolución del conflicto entre la Argentina y Uruguay en torno de la pastera instalada en Fray Bentos “es absolutamente prioritaria” para el futuro gobierno oriental de José Mujica. Así lo aseguró ayer Luis Almagro, quien será el canciller uruguayo cuando en marzo asuma al presidente electo. “No es bueno tener cuentas pendientes con los vecinos”, dijo Almagro, cuyas declaraciones se suman a las expresiones en el mismo sentido del propio Pepe Mujica, quien mostró su disposición a abordar el tema el mes pasado en una visita a la presidenta Cristina Fernández. Sin embargo, Mujica ha dejado también en claro que, a su entender, la planta de celulosa no contamina y que, por eso, su postura es favorable al funcionamiento tanto de Botnia como de otras empresas afines interesadas en invertir en Uruguay.

“El tema con la Argentina y cuáles son los pasos futuros dependen esencialmente de cuál sea el fallo de La Haya. Estimamos que el resultado será favorable en muchos aspectos. Tenemos que darle la practicidad jurídica”, puntualizó Almagro en declaraciones a la prensa uruguaya. “El fallo en sí mismo es muy importante, pero la administración que hagamos del fallo, argentinos y uruguayos, lo es aún más”, agregó el actual embajador de Uruguay en China. “Allí vamos a tener una base jurídica sobre la cual tenemos que trabajar para lograr las soluciones concretas, prácticas y específicas.”

El diferendo por el funcionamiento de la pastera Botnia en la costa oriental del río Uruguay se está dirimiendo en la Corte Internacional de La Haya y el fallo final se espera para el primer semestre de este año. El gobierno argentino considera que la pastera contamina el ecosistema circundante y acusa a Uruguay de haber incumplido el tratado bilateral de 1975 sobre la administración compartida del río. Por esa razón, desde 2006, vecinos de la localidad entrerriana de Gualeguaychú, organizados en una asamblea ambiental, mantienen cortado el paso fronterizo, con un bloqueo del Puente Internacional San Martín. Hace diez días, con una marcha de antorchas y una caravana náutica, los ambientalistas ratificaron la continuidad de la protesta y su reclamo de que se traslade la planta de celulosa.

Diferenciándose del mandatario saliente, Tabaré Vázquez, el presidente electo de Uruguay viene insistiendo en la necesidad de superar el conflicto entre ambos países. Así lo señaló ante la Presidenta en Buenos Aires y luego ante el gobernador de Entre Ríos, Sergio Urribarri, en un encuentro mantenido en Tacuarembó. Poco después de esa reunión, Urribarri reiteró que el corte de los asambleístas sobre el puente “perjudica” al país y “no le hace ni cosquillas” a la pastera de origen finlandés.

Pese a sus gestos buscando recuperar la relación bilateral, Pepe Mujica defiende la instalación de Botnia en su país porque está convencido de que no genera problemas ambientales. Este fin de semana lo aseguró en un encuentro con el diputado del PJ disidente Felipe Solá. “Nadie sabe más en el mundo de ecología que los finlandeses”, dijo Mujica, según difundió el ex gobernador bonaerense. “En lugar de sacarlos –siguió–, nosotros quisiéramos que vinieran muchos más a vivir e invertir en Uruguay.”