Cuatro hombres en dos motos realizaron 14 disparos contra la vivienda del gobernador de Santa Fe, Antonio Bonfatti. Al menos tres de las balas de 9 y 11.5 milímetros ingresaron al living de la casa, donde estaban el mandatario, su esposa, Silvia Tróccoli, y una empleada doméstica. El gobernador socialista ofreció una conferencia de prensa en la que señaló que fue “un atentado a la democracia” y llamó a combatir a “las organizaciones violentas”. Se trabajan diversas hipótesis sobre el origen del atentado: un pase de factura del narcotráfico, un ataque de la barra brava de Newell’s, que está siendo investigada por el Poder Judicial, o bien un mensaje de la policía santafesina. El atentado fue repudiado por todo el arco político, desde Mauricio Macri a Margarita Stolbizer.

El vocero de Bonfatti, Damián Umanski, indicó que el gobernador estaba mirando el partido de Argentina contra Perú cuando comenzaron los disparos. Los atacantes, que llegaron en dos motos, balearon la casa y huyeron. La fiscal de Cámara, Cristiana Rubiolo –que está a cargo de la causa junto con la jueza de instrucción penal María Luisa Pérez Vara–, indicó que “se buscarán pistas sobre los atacantes en las cámaras de seguridad apostadas en el barrio”.

Bonfatti ofreció ayer una conferencia de prensa en la que señaló que sigue firme su compromiso de “combatir a las organizaciones violentas”.

“Lejos de amedrentarnos, con este mensaje que pretendieron darnos nos dan más fuerza porque nos están diciendo que estamos en el buen camino. Esto nos une y nos fortalece. Me siento más fuerte que nunca. Acá venimos los tres poderes del Estado, la Nación, la provincia y los municipios, todos los partidos políticos a ratificar el rumbo de combatir a las organizaciones violentas”, remarcó.

“No fue un ataque a Bonfatti, fue un ataque a la investidura del gobernador, un ataque a la democracia, a las instituciones, a todos los santafesinos”, consideró el gobernador, que fue acompañado por su gabinete en pleno, la presidenta de la Corte Suprema de Justicia provincial, María Angélica Gastaldi; la intendenta de Rosario, Mónica Fein; el ex gobernador de Santa Fe Hermes Binner, el primer candidato a diputado nacional por el Frente para la Victoria Jorge Obeid y por el ministro de Defensa, Agustín Rossi, en representación del gobierno nacional. El único ausente en el Salón Blanco fue el candidato a diputado por el PRO Miguel Del Sel, quien igual hizo llegar su repudio a través de un comunicado. Además, se comunicaron con Bonfatti el secretario de Seguridad, Sergio Berni, y el jefe de Gabinete, Juan Manuel Abal Medina.

El gobernador de Santa Fe relató que estaba sin custodia y, visiblemente emocionado, agradeció a sus vecinos, que minutos después del atentado rodearon su casa. “En mis actividades que no son oficiales no tengo custodia. Quiero ser un ciudadano sin privilegios. Me desplazo y hago las compras como cualquier vecino”, dijo Bonfatti.

Por su parte, Rossi expresó “el respaldo contundente” del gobierno nacional y el “repudio terminante” al atentado. “Nuestra vocación es combatir la criminalidad organizada. Seguiremos profundizando el trabajo conjunto entre la provincia y la Nación”, indicó el ministro de Defensa. En el mismo sentido, Obeid afirmó que “más allá de las rencillas y destratos de la campaña electoral, hay un enemigo común y tenemos que combatirlo”. Binner, por su parte, indicó que trabajan “a favor de la paz para combatir esa violencia con las mejores armas que tiene la democracia, con la seguridad, con la Justicia actuando. Lo importante es defender entre todos la democracia”.

“Como ciudadana de esta provincia siento también que es un ataque a la democracia”, indicó la presidenta de la Corte Suprema de Justicia santafesina, María Angélica Gastaldi, quien afirmó que llevaba “la solidaridad del Poder Judicial de Santa Fe”. Más temprano, el Partido Socialista había emitido un comunicado en el que reclamó “que se realice una profunda investigación, que permita esclarecer los motivos del hecho y juzgar a sus responsables. Cada hecho de violencia que no se combate, que no da con sus responsables, abre la puerta a futuras y más graves amenazas”.