La justicia federal encontró ayer 12 barriles de 25 kilos de efedrina en un depósito fiscal cerca del aeropuerto internacional de Ezeiza. El operativo se realizó a partir de información que aportó el ex militar carapintada Juan José Gómez Centurión, desplazado de la jefatura de la Aduana por una denuncia de corrupción y luego recibido en la Quinta de Olivos por el presidente Mauricio Macri, quien se comprometió a reincorporarlo si el juez Ariel Lijo no encuentra pruebas para procesarlo.

Gómez Centurión se presentó en los tribunales de Comodoro Py para declarar en la causa que instruye la jueza María Servini de Cubría sobre tráfico de efedrina y el triple crimen de General Rodríguez. El ex funcionario –separado preventivamente del cargo a partir de una denuncia anónima que recibió la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich– afirmó que tenía información sobre efedrina escondida desde hacía varios años en containers ubicados en depósitos fiscales de Ezeiza. Aclaró que durante su breve gestión no había podido abrirlos porque, cuando lo intentó, le explicaron que estaban separados y bajo investigación judicial.

Como Servini está de licencia, la orden de allanamiento la firmó el juez Luis Rodríguez. Del operativo participaron, además de los funcionaros judiciales, agentes de la Policía Metropolitana y empleados de de la fiscalía a cargo de Juan Pedro Zoni. Fuentes policiales informaron que en el allanamiento encontraron 12 barriles de 25 kilos de efedrina, según el primer peritaje químico, aunque no descartaron que se tratara de pseudoefedrina, una sustancia derivada de la primera que tiene efectos psicoactivos menores pero que también funcionaría como precursor químico para la producción de drogas sintéticas como las metanfetaminas. Las fuentes no pudieron precisar si se trataba de efedrina importada o preparada para ser exportada y sostuvieron que se encontraba en ese depósito fiscal al menos desde 2011.

La ministra Bullrich, anoche, en una aparición televisiva, sembró un poco más de confusión. “Hay que pensar por qué esto no dio lugar a un procedimiento de las autoridades de la Aduana. Se sabía desde hace dos meses y medio que esos barriles estaban allí, en ese depósito”, señaló.

El hallazgo de efedrina a partir de información aportada por Gómez Centurión se produce ocho días después de que Macri respaldara al ex funcionario y le ratificara que será reincorporado si el juez Lijo determina que no cometió delitos. El militar retirado había sido separado del cargo luego de que Bullrich recibiera un anónimo con escuchas prolijamente editadas que lo involucraban en un presunto cobro de coimas. Desde el comienzo, Gómez Centurión sostuvo que se trató de “una cama” hecha por servicios de inteligencia. Quien primero salió a respaldarlo fue la diputada Elisa Carrió. La socia fundadora de Cambiemos denunció días después que el desplazamiento fue provocado por una “operación de inteligencia” orquestada por “mafias enquistadas” en la ex SIDE que responden a Jaime Stiuso y “negociados” del mundo del fútbol vinculados a Daniel Angelici, presidente de Boca, amigo y operador judicial de Macri.

Tras el respaldo del Presidente, también el ministro de Justicia, Germán Garavano, se plegó a la teoría de la “operación de venganza” y le reclamó celeridad a Lijo. “El gobierno espera que la justicia dirima lo más rápidamente posible si existe mérito para iniciar una acusación o se trató de una operación más de venganza, así se puede recuperar a Gómez Centurión”, afirmó Garavano. El ministro consideró que la Aduana es “un lugar muy difícil porque siempre ha habido corrupción estructural”.