“Es inexplicable que el jefe de Gabinete no venga al Senado. El fue quien eligió la fecha y presentó una nota en la que reclamaba concurrir”, afirmó el titular de la bancada radical de la Cámara alta, el mendocino Ernesto Sanz, al criticar al oficialismo por haber levantado la sesión en la que Alberto Fernández debía cumplir con el informe bimestral al Congreso establecido en la Constitución nacional. La defensa de la mayoría provino, como no podía ser de otro modo, del rionegrino y jefe de la bancada oficialista, Miguel Pichetto. “Yo le recomendé no venir. En este momento no es un escenario adecuado para el debate porque la oposición quiere hacer un debate para los medios”, dijo el kirchnerista.

En su queja por el faltazo de Fernández, el senador radical y compañero de fórmula de Roberto Lavagna, el jujeño Gerardo Morales, recordó que en lo que va de 2007 el jefe de Gabinete nunca se presentó en la Cámara alta. También comentó que en el año anterior “sólo concurrió en dos ocasiones”. El mandato constitucional define que el informe será cada dos meses en cada cámara. De acuerdo al artículo de la Constitución, las visitas al Congreso tendrían que ser un hecho mensual.

Para Sanz, “Fernández no se presentó en el Senado porque el Gobierno no quiere debatir los casos que han generado fuerte impacto en la opinión pública”. Fue Morales quien los enumeró. Comentó que querían preguntar por el empresario venezolano Antonini Wilson y los ochocientos mil dólares que traía en una valija; por la bolsa con dinero que apareció en el baño de la ex ministra de Economía, Felisa Miceli, y por las contrataciones de la Secretaria de Medio Ambiente, Romina Picolotti. El senador jujeño informó que por escrito, en las 261 preguntas remitidas hace más de un mes, los radicales querían saber “cuánto les paga el gobierno a los encuestadores”.

Pichetto señaló que el jefe de Gabinete había remitido un informe escrito en el que respondía todas las preguntas de la oposición. “Iba a ser un debate cargado de denuncias porque la oposición carece de propuestas y quiere convertir al Congreso en un espacio mediático que no es serio”, dijo el rionegrino al defender la ausencia de Fernández.