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La ministra de Producción, Débora Giorgi, adelantó ayer que en la semana habrá anuncios para el sector de la marroquinería. Concretamente, la funcionaria señaló que se lanzarán las líneas de prefinanciación para exportaciones, a través del BICE y el Banco Nación, que serán créditos a tasa fija al 7 por ciento en dólares, con un plazo máximo de 180 días. Las medidas para el sector del cuero forman parte del conjunto de incentivos comprendidos en el capítulo industrial, que estima un fondeo total de 1250 millones de pesos. Para otorgar el financiamiento, los proyectos deberán ser analizados por la Unidad de Evaluación, donde la ministra y el secretario de Comercio, Guillermo Moreno, elevarán sus recomendaciones al Sistema Integrado de Previsión Argentina, a cargo de Amado Boudou. La ministra de Producción agregó que en el transcurso de la semana se darán a conocer los cuatro esquemas de financiamiento para todos los proyectos productivos y planes específicos para las economías regionales.

“Cuando analizamos todo el paquete de estímulo presentado por Cristina Fernández de Kirchner, y teniendo en cuenta el impacto que tendrá en cada uno de los sectores (industriales, agropecuarios, pymes, turismo, cadenas de comercialización, construcción, electrodomésticos, etc), creemos que estaremos preservando 1.500.000 puestos de trabajo”, afirmó Débora Giorgi.

A los detalles presentados ayer sobre los planes para aumentar la producción y el consumo en el sector automotriz, la ministra le sumará anuncios para la cadena del cuero, la marroquinería y las economías regionales. Para la marroquinería se ofrecerán opciones destinadas a la prefinanciación de exportaciones y capital de trabajo a tasas fijas del 7 por ciento en dólares, que tendrán plazos entre los 90 y 180 días.

Por otro lado, también anticipó que habrá anuncios para las economías regionales (ajo, lana, madera, frutas, etc). Según Giorgi, los 1700 millones destinados a la prefinanciación de exportaciones y bienes de capital para el sector agropecuario representan un aumento del 12 por ciento del stock de crédito actual para las economías regionales.

Los monetizadores serán el BICE y el Banco Nación. Los diferentes instrumentos que se aplicarán funcionarán a través de las licitaciones que haga la Anses en el MAE. Una variable será realizar los aportes a las entidades públicas, y la otra directamente a través de compulsas a las cadenas de bienes durables, como las comercializadoras de electrodomésticos, cadenas de compra de muebles, materiales de la construcción, turismo. “Esto no es un paquete cerrado, sino que puede haber modificaciones siempre destinadas a la activación de la producción nacional”, señaló Giorgi.

El mecanismo para calificar cada proyecto será similar al que venía aplicando Giorgi en la provincia de Buenos Aires. Para ello, se creará la Unidad de Evaluación de Proyectos destinada al análisis de las cadenas de valor del sector industrial y las economías regionales, que recibirán los diferentes proyectos a través de la Secretaría de Comercio y el Ministerio de Producción. Tanto Giorgi como Moreno harán la evaluación de las presentaciones y recomendarán la financiación al SIPA. Boudou tendrá la última palabra. La condición para aprobar los proyectos es que sirvan para mantener los niveles de empleo.

“El paquete (de contingencia) de la Presidenta, con un 50 por ciento para ser destinado al consumo –que representa el 80 por ciento de PBI– y otro 50 por ciento para la industria, el agro y las pymes, es un programa que consiste en la reorientación de los fondos financieros hacia verdaderos incentivos productivos”, afirmó Giorgi. Con los 13.200 millones de pesos anunciados, el Gobierno estima que podrá preservar aproximadamente 1.500.000 puestos de trabajos. “Este es un cambio de paradigma en el sistema de seguridad social. Este cambio demuestra que potenciaremos el sistema financiero, que competirá para ofrecer las tasas más bajas para los consumidores”, concluyó Boudou.