“La amplia mayoría de los votos demostró qué poderoso puede ser el consenso global para frenar el comportamiento financiero predatorio”, dijo Eric LeCompte, director ejecutivo de la organización Jubilee USA. “Si vamos a resolver lo que los líderes globales consideran que son las causas profundas de la desigualdad, necesitamos un sistema de quiebra en su lugar”, agregó LeCompte, miembro del grupo de expertos de las Naciones Unidas que trabajan para crear ese sistema. Y se lamentó “junto a toda la comunidad de la fe, de que el gobierno de los Estados Unidos haya votado en contra de nuestros esfuerzos, nuestros líderes nos fallaron hoy”. LeCompte se pronunció así sobre la resolución aprobada ayer por la asamblea general de la ONU, que demanda la creación de un marco legal internacional para regular la reestructuración de las deudas soberanas y proteger a los países de acreedores especuladores, como los fondos buitre que enfrenta la Argentina en la actualidad. Jubilee es una alianza norteamericana de más de 75 organizaciones sociales y 400 comunidades religiosas que promueven una economía que proteja a los sectores más vulnerables.