Organizaciones de derechos humanos rechazaron unánimemente el accionar de las fuerzas de seguridad en la protesta de trabajadores de Cresta Roja, que concluyó con heridos de bala de goma y detenidos. En un documento conjunto, Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora, Abuelas de Plaza de Mayo, Familiares de Detenidos y Desaparecidos e HIJOS Capital calificaron de “brutal” la represión y destacaron que “entre los manifestantes agredidos se encontraban familias, mujeres y niños” y que se desató luego de que los trabajadores hubieran llegado a un acuerdo con las autoridades para dejar libres dos carriles. El hecho, agregaron, “marca un claro retroceso en cuanto a los derechos que todos los argentinos adquirimos en esta última década respecto de la no represión de la protesta social”. Por su parte, el Centro de Estudios Legales y Sociales sostuvo que “este conflicto, en el que están en juego 4500 puestos de trabajo, requiere el compromiso estatal de garantizar una negociación política que conduzca a una solución y no una intervención violenta de las fuerzas de seguridad”. En tanto, la Coordinadora contra la Represión Policial e Institucional (Correpi) dijo que “no resulta sorprendente la aplicación de la política represiva” cuando “se trata de criminalizar la protesta social”.