EL PAíS
Sin la UOM y sin Saúl
La ausencia de la Unión Obrera Metalúrgica en la conducción de la CGT unificada fue uno de los datos más llamativos de la jornada. Sin haber encontrado un reemplazante del fallecido Lorenzo Miguel, el gremio metalúrgico parece navegar en un mar de indecisiones. Ayer publicó una solicitada (“La CGT es una sola, la de los trabajadores”) preanunciando su deserción al congreso a partir de la falta de unidad entre “gordos” y “rebeldes”, que finalmente no fue tal. Es curiosa la actitud, sobre todo por la reivindicación del perfil industrial y las “políticas productivas” que la UOM hace del Gobierno en el propio escrito. Claro que los “meta” no fueron los únicos que quedaron fuera del nuevo esquema de poder cegetista. Lo mismo sucedió con Saúl Ubaldini. Pero el cervecero igualmente dijo presente, haciendo gala de su habitual campera de cuero, de su habitual manera de fumar y, desde hace un tiempo a esta parte, de su habitual cabello azabache.