Un grupo de familiares de víctimas de Cromañón encabezados por el abogado José Iglesias utilizó el día previo al veredicto en el juicio político a Aníbal Ibarra para realizar varias denuncias. Por un lado, denunciaron al suspendido jefe de Gobierno porteño y al director teatral Roberto “Tito” Cossa por los presuntos delitos de injurias y discriminación. Además, acusaron al actual presidente de la Comisión de Representantes Permanente del Mercosur, Carlos “Chacho” Alvarez, de presionar a la legisladora integrante de la Sala Juzgadora Beatriz Baltroc para que vote a favor de Ibarra. Coincidentemente, un grupo de jóvenes realizó anoche un violento escrache en la casa del hijo de Baltroc (ver página 3).

La denuncia contra Cossa se basaba en un artículo publicado el 21 de noviembre de 2005, en el que el director teatral sostenía que a Ibarra se lo perseguía “como se perseguía a los judíos en la Alemania de los años ’30”. Los familiares consideraron que “estas manifestaciones que contienen una clara y directa acusación a los suscriptos de cometer una persecución fundada en un odio irracional, comparable según lo afirma el propio Cossa con la persecución de los nazis contra los judíos de la Alemania del ’30, constituyen un gravísimo agravio a nuestro honor y reputación”, subrayaron los familiares.

En cambio, la denuncia a Chacho Alvarez tenía que ver con una supuesta presión a Baltroc para que “modifique su voto”. Iglesias aseguró que Alvarez “habló el último viernes a las 19 durante 10 minutos con Baltroc”. Sin embargo, no pudo dar precisiones acerca del contenido del diálogo. “No conocemos las minucias de cómo se ejercieron las presiones”, explicó. Horas después se conoció el escrache al domicilio de la legisladora.