“Esto es una tragedia, no sólo para la chica y su familia, no sólo individual, sino institucional”, afirmó Ginés González García, ministro de Salud de la Nación, y fustigó “las demoras, las dilaciones en la Justicia” y “las intimidaciones”.

González García sostuvo que “el necesario debate sobre el aborto fue transformado en combate” por sectores entre los que mencionó al juez Federico Domínguez y a Raúl de la Torre, rector de la Universidad Católica de La Plata (ver nota aparte), a los que atribuyó acciones “intimidatorias”.

El ministro observó que “el caso estaba totalmente tipificado por la ley en vigencia: confiando en la ley, se presentaron, y terminó en todo esto”. El funcionario sostuvo que “este caso ejemplifica una grave situación”, de la que destacó los siguientes datos: “Entre 500 y 800.000 abortos clandestinos estimados por año; 80 mil internaciones en hospitales públicos por efectos de abortos clandestinos, que a su vez dan lugar a un tercio de la mortalidad materna en la Argentina”.