La Secretaría de Derechos Humanos de la Nación pidió ayer a la Justicia ser parte querellante en dos causas que investigan delitos de lesa humanidad cometidos durante la última dictadura militar. El jefe de Gabinete de la secretaría, Luis Alén, se presentó ante el juez federal de San Nicolás, Carlos Villafuerte Russo, para pedir que se incorpore al Estado como querellante en la investigación de los asesinatos del obispo Horacio Ponce de León y de los militantes Eduardo Pereyra Rossi y Osvaldo Cambiaso. En el caso del obispo Ponce de León, muerto en un supuesto accidente automovilístico, el principal acusado es el coronel retirado Manuel Saint Amant. Por los asesinatos de los militantes montoneros Cambiaso y Pereyra Rossi se exigió la detención y el procesamiento de Luis Patti, Juan Spattaro y Rodolfo Diéguez. “Se buscó disfrazar los crímenes mediante la tramitación de procesos judiciales plagados de falsedades, para garantizar la impunidad de los autores”, estimaron los querellantes.