Sandra Rodríguez de Fuentealba, la compañera del docente asesinado en Neuquén a principios de abril durante una brutal represión policial, lanzó ayer desde su provincia una campaña nacional de firmas por el “juicio y castigo a los responsables de la represión y el fusilamiento público del compañero Carlos Fuentealba”. El anuncio de la docente patagónica se realizó desde la Asociación de Trabajadores de la Educación de Neuquén (ATEN), sindicato que logró el apoyo de la Ctera y la Central de los Trabajadores Argentinos (CTA) para que la iniciativa se haga extensiva a nivel nacional. En pocos días más, un petitorio por Fuentealba comenzará a circular por todo el país.

El secretario general de ATEN, Marcelo Guagliardo, informó que este petitorio –que circulará por escuelas y hospitales de todas las provincias– es impulsado por una comisión que lleva por nombre “Carlos presente, justicia ya”. “Llamamos a todos los sectores para que apoyen con su firma el no a la impunidad aquí en Neuquén y en todo el país”, reclamó el dirigente en conferencia de prensa, agregando que “con esto exigimos el castigo a los responsables materiales, políticos e ideológicos del crimen del compañero Fuentealba y a los que dieron la orden de reprimirnos en la ruta 22 ese 4 de abril”.

En el lanzamiento público de la campaña estuvo presente la viuda del maestro asesinado, Sandra Rodríguez, quien dijo a Página/12: “Pretendemos que el caso de Carlos no quede en el olvido y para eso el primer objetivo que tenemos es que miles de firmas contra la impunidad lleguen al juez de la causa”. Consultada acerca de las declaraciones conocidas en Neuquén del gobernador Jorge Sobisch, donde dijo que él mismo y su esposa lloraron por la muerte del docente asesinado, la compañera de Fuentealba dijo que “esas lágrimas hoy no sirven. Esas lágrimas se tienen que convertir en la renuncia a su cargo y, como él también lo dijo, el ponerse en manos de la Justicia para ser juzgado por la orden que él dio y que luego reivindicó”.

En distintos reportajes locales al gobernador, se le consultó si se había comunicado con la familia de Fuentealba y le había transmitido alguna clase de pesar. “No se comunicó para nada conmigo –aclaró la esposa del docente asesinado– y tampoco quiero sus condolencias. Lo único que quiero es que él renuncie y que se ponga en manos de la Justicia. Es el único acercamiento que quiero. Ningún otro.”

Respecto de lo que declaró su abogado, Gustavo Palmieri, afirmando que hubo una segunda orden a los policías que estaban reprimiendo justo antes de que balearan a su esposo, Sandra Rodríguez no dudó en afirmar que “la orden de escarmentar (a los docentes en la ruta) estaba. Si hubo otras órdenes intermedias siempre en relación al objetivo de escarmentar a mis compañeros, yo creo que sí”.

Para impulsar la campaña lanzada por Fuentealba, se convocó a organizaciones políticas y sociales, estudiantiles y gremiales de Neuquén a una reunión que se realizará mañana en la sede provincial de ATEN.