“Desmiento el apoyo a Cóccaro y mantengo mi postura prescindente para la segunda vuelta”, expresó ayer en un comunicado el intendente de Ushuaia y ex candidato a gobernador, Jorge Garramuño. “Cualquier decisión sobre apoyos la tiene que tomar el partido”, señaló el ex candidato al que todos los encuestadores y políticos habían pronosticado que competiría en el ballottage que elegirá al gobernador fueguino.

El comunicado trascendió luego de que Cóccaro firmara con el sector mayoritario del MPF, que responde al ex gobernador José Estabillo, un acta-acuerdo. Miembros de la campaña del gobernador señalaron que esa movida podría “favorecer al gobernador con un importante caudal de votos”.

La aclaración de Garramuño dio por tierra con informaciones que lo señalaban apoyando a Cóccaro. A través de distintos medios se había repetido que el ex candidato había dicho que, de ganar el ARI, “Tierra del Fuego volcaría”.

Cóccaro no ocultó cierto fastidio con Garramuño. “Debería estar en la provincia tomando partido por una fórmula o por otra, lo que a él le parezca mejor. Eso es lo normal”, dijo el candidato del oficialismo.