El titular de Volkswagen argentina, Víktor Klima, reconoció ayer que el paso de la candidata Cristina Fernández de Kirchner por Wolfsburgo había sido una invitación de su empresa que corrió con los gastos. Ex canciller de Austria por la socialdemocracia, a Klima se lo considera uno de los organizadores de este viaje de la senadora. Ducho en las huestes de enfrentarse a la prensa, Klima consideró natural esta deferencia con una candidata a la presidencia, siendo que hay otros en campaña. “Sabemos que la senadora es muy importante para la provincia de Buenos Aires y nosotros tenemos una planta en General Pacheco”, respondió con rápidos reflejos. Klima, no por nada su nombre tiene dos “k”, se mostró entusiasmado con el proyecto esbozado ayer por Cristina Kirchner en su discurso ante los empresarios. “Para mí es muy importante que la señora entienda necesaria la reindustrialización”, sostuvo en su castellano fluido pero con marcado acento alemán. El empresario descartó que la crisis energética le hubiera significado algún costo adicional a su fábrica. “No hemos dejado de construir ni un coche por la falta de energía”, aseguró. Incluso dijo que en su planta no habían tenido que trabajar a los horarios de menor consumo, de acuerdo con el diagrama que hizo el Gobierno para las grandes empresas.