El volcán Popocatépetl, conocido popularmente en México como “Don Goyo”, comenzó el viernes a emitir gases y cenizas, formando una columna de tres kilómetros de altura. El Popocatéptl suele echar humo a lo largo de todo el año, pero esta vez las autoridades solicitaron a la población que se mantuviera lejos del cráter. Es que hay riesgo de exhalaciones de ceniza y explosiones esporádicas de nivel bajo a moderado, con probabilidad de emisión de fragmentos incandescentes (lava). Ayer el volcán se moderó, con una columna de un kilómetro, lo cual no se considera como una fumarola grave, aunque la cercanía al Distrito Federal genera temor en la población. Por su parte, las autoridades nacionales han dispuesto un cordón alrededor del cráter para mantener a los habitantes alejados en caso de que haya una emisión de lava. El Centro Nacional de Prevención de Desastres informó en su boletín diario que la emisión de los últimos dos días se encuentra contemplada en los escenarios que corresponden al semáforo de alerta amarilla, fase dos. El Popocatépetl es el segundo volcán más grande de México y registró dos emisiones desde 2008. Históricamente había tenido un bajo nivel de actividad, pero a partir de 1991 se incrementó y a partir de 1993 las fumarolas son frecuentes y visibles desde el DF.