Una formación de la línea B de subte descarriló ayer en la cochera de la nueva estación Juan Manuel de Rosas, sólo siete horas después de que se comenzara a prestar el servicio hasta el final del trayecto. De acuerdo con la concesionaria Metrovías, el episodio se debió a una “maniobra incorrecta” que activó el sistema de seguridad y descolocó al tren. En tanto, los metrodelegados señalaron que falló la aguja de cambio de vía. En este sentido, informaron que no trabajarán en el sector de cocheras y talleres y exigieron que se convoque a una Comisión de Seguridad e Higiene. Por su parte, una protesta de vigiladores “tercerizados” mantuvo paralizada la línea A durante tres horas en la tarde de ayer.

“El hecho ocurrió a las 12 con una formación sin pasajeros que estaba en la cochera Rosas. A raíz de una maniobra incorrecta del conductor, que traspasa una señal en rojo, se activó el dispositivo de seguridad operativa que, como medida de protección, produce el descarrilamiento de los primeros dos coches de la formación”, afirmó Lucía Ginzo, gerente de Relaciones Institucionales de Metrovías.

“Este dispositivo, que justamente se llama descarrilador, funciona como una medida preventiva del sistema ante cualquier eventualidad que pueda afectar la operación en dicha zona de trabajo. Esto demuestra que todos los sistemas de seguridad funcionaron correctamente. No hay anomalías en la infraestructura tal como mencionaron los metrodelegados”, aseguró.

Además, resaltó que el instructor estaba capacitado y habilitado para manejar trenes y que el servicio no se vio afectado.

Por otro lado, la Asociación Gremial de Trabajadores del Subte y Premetro (AGTSyP) también dio su versión. “Aproximadamente a las 11.30 una formación CAF Serie 5000 denominada Chapa X descarriló en la entrada de la cochera Juan Manuel de Rosas mientras era conducida por personal jerárquico de seguridad operativa no perteneciente a este sindicato. La formación avanzó hacia la cochera y se encontró con el descarrilador en la vía.”

“Si bien en el acta firmada el martes pasado con Metrovías se acordó que, con ciertas mejoras en puntos críticos, el tramo hasta la estación Rosas cumplía con las condiciones mínimas de seguridad, el taller-cochera se encuentra clausurado por fisuras en la bóveda del túnel de hormigón, filtraciones en los vestuarios y caída de agua sobre los tableros eléctricos”, agregaron los metrodelegados.

De acuerdo con esto, insistieron en la conformación de una Comisión de Higiene y Seguridad. “La AGTSyP pidió a lo largo de toda la discusión que se forme una comisión de seguimiento de las condiciones de higiene y seguridad que funcione en el ámbito de la Subsecretaria de Trabajo de la Ciudad con la participación obligatoria de Metrovías, Sbase y AGTSyP. Por lo tanto, solicitamos al subsecretario Ezequiel Sabor que la convoque de manera inmediata para tratar como primer punto las condiciones del sector de taller y cocheras de Juan Manuel de Rosas, tal como lo manifestamos oportunamente en el acta.”

El secretario general adjunto de AGTSyP, Néstor Segovia, también se refirió a la falta de sistema de comunicación. “Los trabajadores hace tiempo veníamos advirtiendo que estas cosas podían pasar. El problema es que no han instalado el sistema de comunicación ni han hecho mantenimiento en zonas como la cochera, que durante mucho tiempo estuvo inundada y cuya infraestructura se oxidó por completo. En la cochera los celulares no tienen señal, entonces el conductor nunca se enteró de que la aguja de cambio de vía no funcionó porque está toda oxidada y descarriló.”

En tanto, el delegado de la línea B, Claudio Dellacarbonara, habló de la situación en que se encuentra el servicio. “Los dos vagones se salieron de las vías, se rompieron. Con la inauguración empeoró todo porque no tenemos con qué afrontar la demanda de los miles de usuarios nuevos que se suman a la línea y la empresa tiene que explicar por qué el servicio es cada vez peor.”

“Vamos a discutir con los compañeros en asamblea. En principio mantenemos la decisión de no trabajar en estos sectores porque las denuncias tienen consecuencias reales”, subrayó.

Los metrodelgados aseguraron que también existe riesgo en la línea C, “donde el mantenimiento no se realiza y los trenes circulan con frenos desgastados que pueden provocar un desastre en cualquier momento”.