El asesinato de un chico de 14 años, ocurrido en la madrugada del lunes, generó anoche una protesta frente a la comisaría 4ª de San Martín, en José León Suárez, donde un grupo de manifestantes quemó una decena de autos que se encontraban en la playa de estacionamiento de la seccional. Los vecinos, consultados por Página/12, aseguraron que los incidentes se produjeron porque “las autoridades policiales se negaron a recibir al padre del chico y porque hay sospechas, desde hace mucho tiempo, de que sectores policiales protegen las actividades de una bandita de ‘transas’ (vendedores de drogas), uno de los cuales habría sido el que mató al pibito, de dos tiros por la espalda, por un problema personal”. La misma comisaría fue intervenida en febrero de 2011, luego de que se produjera la muerte de dos jóvenes y que otro chico recibiera heridas graves durante una represión policial tras el descarrilamiento de un tren de carga en el barrio De la Cárcova. Por ese hecho están detenidos dos policías.

El nuevo homicidio, atribuido por testigos a un presunto vendedor de droga, tuvo como víctima a Enzo, un chico que –aseguran los vecinos que conversaron con este diario– “no estaba vinculado con ninguna de las ‘banditas’ que venden droga en el barrio, sin que la policía ni la Justicia hagan nada para ponerle fin a esa situación”. Los vecinos del barrio De la Cárcova, ubicado a poco más de diez cuadras de la comisaría 4ª, vienen “juntando bronca” porque hace una semana, en el barrio Independencia, también en José León Suárez, fue asesinada una adolescente llamada Ivone, en un hecho que no tiene, por ahora, ningún imputado.

Luego de finalizados el velorio y el sepelio de Enzo, entre la noche del domingo y la tarde del lunes, los vecinos programaron para ayer a las 18 una marcha hasta la seccional 4ª para pedir justicia. La movilización fue encabezada por Juan Enrique Ledesma, el padre de Enzo. El hombre explicó anoche que habían llegado hasta la puerta de la comisaría “para hablar sobre cómo es el asunto acá en el barrio, donde nos siguen matando pibes, pero nadie nos quiso recibir y los incidentes, que nosotros no promovimos, los hicieron vecinos que están muy cansados por lo que pasa”.

Un pequeño grupo, que se desprendió del resto de la manifestación, fue el que entró en el playón trasero de la seccional, donde primero le prendieron fuego a un patrullero que estaba en reparación. También incendiaron otros autos y motos secuestrados que estaban allí. La policía reprimió con disparos “de estruendo”, según señalaron fuentes de la comisaría. Con posterioridad, una formación del Grupo de Apoyo Departamental (GAD), una fuerza especial de choque, se alineó frente a la comisaría para impedir el avance de los manifestantes.

El frente de la comisaría fue apedreado por los vecinos, que hoy, a las diez de la mañana, tienen previsto movilizarse hasta los tribunales de San Martín para pedir justicia por el asesinato de Enzo. La policía afirma que el chico fue apuñalado y que el autor del crimen está identificado, pero el padre de Enzo y los vecinos tienen otra versión.

“Dicen que lo apuñalaron y no es así. Le metieron dos tiros. Salió en la autopsia”, precisó Ledesma respecto de la forma en que asesinaron a su hijo. Acusó del hecho a “quince locos que actúan como quieren porque están amparados por la policía local”. El hombre sostuvo que “la policía sabe quién lo mató, pero nadie va a buscarlo”. En febrero de 2011, la policía mató a tiros a Franco Almirón (16) y Mauricio Arce Ramos (19) e hirió de gravedad a Joaquín Romero (18). Están presos por ese hecho los agentes Gustavo Sebastián Rey y Ezequiel Vega.