“El mejor homenaje que le podemos brindar a Raúl Alfonsín es la recuperación del radicalismo a lo largo y a lo ancho del país”, arengó el titular de la UCR, Mario Barletta, dando cuenta del festejo de los 30 años de democracia y de la presentación de los principales diputados y senadores electos el último domingo. Con la presencia estelar de Julio Cobos, Ricardo Alfonsín y Ernesto Sanz, los radicales enviaron una señal de construcción hacia fuerzas “democráticas, progresistas y republicanas” de cara al 2015 y comenzaron a tejer el nuevo mapa de poder hacia adentro del partido, que el 13 de diciembre renovará sus autoridades y debe también definir la jefatura de los bloques parlamentarios.

Conformes con un resultado que los deja posicionados como una fuerza con desarrollo territorial en todo el país, los radicales exhibieron ayer su análisis de la elección, en el que destacaron un 25 por ciento de los votos obtenido a nivel nacional, la victoria en siete provincias (Santa Fe, Corrientes, Jujuy, Catamarca, Mendoza, Santa Cruz y La Rioja –esta última a la espera del escrutinio definitivo–) y en doce capitales de provincia. “¿Vieron que la oposición existía?”, se agrandó Barletta, que aprovechó para comparar los votos que sacó el kirchnerismo en la elección presidencial con los que obtuvo en la última legislativa. “Más de cinco millones de argentinos, en menos de dos años, han dejado de confiar” en el gobierno nacional y “decidieron poner los ojos en la oposición, en la UCR y sus aliados”, consideró el titular del Comité Nacional antes de darle la palabra a los tres referentes más importantes del radicalismo.

“Esta transición democrática tiene el valor singular de ser la última. Nuestro principal desafío era terminar con las interrupciones democráticas y consolidar la democracia para los tiempos”, arrancó Ricardo Alfonsín, hijo del ex presidente, quien hizo una semblanza del primer gobierno luego de la dictadura militar y del Juicio a las Juntas. “Hace treinta años fuimos capaces de representar el anhelo de la sociedad en ese momento. Hoy hay otros anhelos en la sociedad que se han puesto de manifiesto. En 2015 nos van a votar si somos capaces de salir a la calle a encontrarnos con el anhelo de progreso de la sociedad argentina”, aseguró Sanz en un encendido discurso, en el que también remarcó la importancia del radicalismo como partido. “Frente a la democracia fashion debemos hablar de partidos, reglas de juego, disciplina, para confluir en un gran espacio progresista contra la decadencia”, remató el senador por mendoza.

Tras el amplio triunfo en su provincia, donde obtuvo el 48 por ciento de los votos, el ex vicepresidente Julio Cobos fue el último orador del acto. Recordó a Raúl Alfonsín, pidió recuperar los valores del trabajo y la educación para combatir la pobreza y la inseguridad. “Tenemos un desafío muy grande por delante porque la sociedad ha vuelto a confiar en la UCR”, consideró Cobos, que advirtió “no perder el tiempo en temas internos, ya que hay suficiente espacio para que todas las líneas se integren”.

Fue un mensaje de cara a la renovación de autoridades partidarias, que se realizará el próximo 13 de diciembre. Atada a esa discusión, los radicales también tienen que resolver quiénes serán los presidentes de los bloques legislativos para el período 2013-2015. Tanto Sanz como Alfonsín suenan como los hombres para ocupar el lugar en el histórico comité de la calle Alsina, mientras la jefatura de la bancada en Diputados se disputa entre los cordobeses Mario Negri y Oscar Aguad. En el Senado, en cambio, podría volver a presidir el bloque el jujeño Gerardo Morales, que volvió a asociarse con Sanz luego de apoyar la candidatura presidencial de Alfonsín. Cobos, que cuenta con varios delegados propios, manifestó a los suyos que no tiene intenciones de ocupar ningún cargo.

Ayer asistieron los legisladores electos Héctor Gutiérrez (Buenos Aires), Carla Carrizo (CABA), Francisco Torroba (La Pampa), José Riccardo (San Luis), Cobos y Luis Petri (Mendoza), Mario Fiad (Jujuy), entre otros, y hubo menciones a Angel Rozas, Eduardo Costa, Eduardo Brizuela del Moral y Julio Martínez, que no pudieron concurrir. El socialista Hermes Binner mandó una carta.