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Una pequeña intervención comenzó a dejar más elementos sobre el pacto de silencio que existe en Santiago del Estero para ocultar a los responsables del doble crimen de La Dársena. El nuevo aporte apareció ayer y es el testimonio de una enfermera del Hospital Regional que se presentó en el juzgado de La Banda para mencionar el nombre de los médicos y de los enfermeros que habrían atendido o estado en contacto con Leyla Bshier Nazar durante el 16 de enero, la noche en que habría sido trasladada al hospital Independencia para una reanimación por una sobredosis de cocaína.
La enfermera es uno de los testigos que ayer aportó la familia de Patricia Villalba, la otra chica asesinada en Santiago del Estero. Su testimonio resulta clave ahora para situar el paso de Leyla por uno de los dos hospitales públicos de Santiago. El relato volvió a poner en escena una de las hipótesis de los Villalba: que aquella noche quienes estaban con Leyla consiguieron entrar al hospital y transformarlo en una suerte de zona liberada, con la protección de los hombres del poder.
En su paso por el juzgado, la enfermera le dio algo de firmeza a esa hipótesis. Aseguró que Leyla pasó por el Hospital Independencia, un dato que no habría conocido en forma directa sino en junio y a través de un colega llamado Castillo. La mujer ya había hablado de ese contacto en junio, en un programa de radio de Buenos Aires. Su testimonio quedó registrado en un casete y la grabación fue reenviada a La Banda, donde la convocaron para que lo ratificara: “Ahora la enfermera confirmó todos sus dichos”, explicó después de la declaración Arrulfo Hernández, el juez que lleva la causa. “Se trata de un indicio –aclaró Hernández– que aún hay que investigar porque del primer listado del personal de guardia del Hospital Independencia no surge ninguna persona de apellido Castillo.”