Tras declararse adicta a la cocaína, la vedette Moria Casán obtuvo la libertad provisional en la causa que afronta por tenencia de esta droga, pero permanecerá tras las rejas durante la Navidad. La decisión del juez penal de garantías paraguayo Rubén Riquelme no la exime del juicio pendiente por el presunto robo de joyas ocurrido en el 2012, y por el cual viajó a Paraguay en primer lugar. El juez Riquelme le concedió la libertad en el caso de la droga pero sigue pendiente el revocamiento de la prisión por el robo de una gargantilla y un par de aros de zafiro, denunciado por el joyero Armando Benítez hace más de tres años. Por este motivo la vedette permanecerá en prisión hasta el lunes, cuando declarará por esta causa.

Casán ya había concurrido a los tribunales. Antes de ser detenida, la actriz se “había presentado ante la Justicia paraguaya el día lunes de la semana pasada con intenciones de hacer frente a la acusación de Benítez”, recordó su abogado, Osvaldo Peña. Benítez la acusó de haberse apropiado de las joyas al finalizar un show en Asunción en el que exhibió las prendas.

Tras la presentación de ese momento, la Justicia decidió no otorgar a Moria Casán el beneficio de la prisión domiciliaria y, en cambio, la destinó al penal de mujeres de Asunción. Mientras se efectuaba la detención, la situación de la actriz se complicó, porque durante el registro que precede al ingreso en la cárcel de mujeres, el martes pasado, le descubrieron 1,6 gramo de cocaína en la billetera.

En su sentencia, el juez Riquelme se basó en exámenes psiquiátricos y psicológicos, de orina y sangre para dictaminar que la artista, de 69 años, padece una adicción a la cocaína. Si bien los exámenes físicos no detectaron presencia de la droga en sangre y orina, las pericias psiquiátricas fueron suficientes para demostrar que Casán padece una adicción.

El magistrado transmitió esta información a la fiscalía, por lo que se “allanó al cambio de calificación y posibilitó que la expectativa de pena sea menor, por lo que se le dio la libertad ambulatoria”, dijo Riquelme en alusión al régimen de libertad provisional.

La abogada Myriam Areco confirmó que el magistrado paraguayo concedió medidas alternativas a la prisión para la vedette en la causa por la tenencia de cocaína, aunque “queda pendiente la resolución de la apropiación de una joya durante un viaje a ese país en 2012”.

Los medios locales informaron que la defensa de Casán ofreció una fianza de 210 mil dólares y un inmueble propiedad de la abogada para obtener el beneficio de la excarcelación.

La defensa alegó que Casán tiene problemas de adicción para evitar un proceso por tenencia ilegal de estupefacientes, que en Paraguay tiene una pena de 5 a 15 años de prisión.

Por su parte, la abogada Areco recordó que si bien no salió en los exámenes físicos realizados a la diva, durante la pericia psiquiátrica Casán admitió que habitualmente consume cocaína “de forma compulsiva” desde los 20 años y marihuana desde los 30.

Además de la libertad provisional, el juez impuso a Moria Casán una multa de 50 millones de guaraníes (el equivalente a ocho mil quinientos dólares), estableció que debe comparecer ante el juzgado mensualmente, y le prohibió abandonar Paraguay sin su autorización.

En la causa de las joyas, Ana María Casanova, nombre original de la actriz, deberá comparecer el lunes 28 ante la jueza Dina Marchuk por requerimiento de una fiscal que pidió la “suspensión condicional del procedimiento” por un año.

Este trámite judicial implicaría que Casán acepte el hecho que se le atribuye –aun cuando haya llegado a un acuerdo con la víctima– y proceda a efectuar una reparación social, que superaría los 200 mil dólares.

Antes de decretar su libertad absoluta, la jueza podría imponer también a la argentina la obligatoriedad de visitar el juzgado cada tres meses por un año y realizar una donación a entidades de beneficencia.

Por ahora, Casán deberá permanecer en Paraguay hasta la resolución de la causa por el supuesto robo de joyas por un monto equivalente a 80 mil dólares –causa por la cual tenía un pedido de captura de Interpol–, propiedad del joyero paraguayo Armando Benítez.

Si bien corrieron rumores de un supuesto arreglo, la jueza Marchuk relativizó que exista un acuerdo extrajudicial, porque el documento lleva la firma del abogado del joyero y no de la persona realmente afectada.

La causa en la que se acusa a la vedette de robar una joya que lució durante un desfile realizado en las instalaciones de la Conmebol paraguaya surgió en 2012 y, por ese hecho, la actriz está imputada junto a su manager y productor Luciano Garbellano y su asistente personal Aldo Alexis “Galo” Sottola.