Las medidas de precaución en la costa rioplatense por la presencia de víboras que llegaron a la zona con la invasión de camalotes provenientes de las inundaciones del Litoral continuaban en balnearios de Quilmes, Ensenada y Berisso para impedir que la gente se acerque a los animales y evitar mordeduras, que hasta el momento no se produjeron. Ayer, el municipio comenzó con topadoras las tareas de remoción de las plantas acuáticas. Los especialistas estiman que apenas llegó el 10 por ciento de la gran masa que se espera para el 2 de febrero. Los camalotes llegaron incluso a la costa de la ciudad de Buenos Aires, en Costanera Norte, en la Reserva Ecológica y en Puerto Madero. La Prefectura aseguró que “no se está realizando ningún operativo especial porque no afectan la navegación”.