Una familia tipo necesitó 988,37 pesos para no caer en la pobreza en junio, lo que implica un alza 1,2 por ciento respecto del mes anterior, según informó hoy el INDEC.

En tanto, para sumirse en la indigencia un matrimonio y dos hijos tuvo que obtener ingresos por 454,57 pesos, 1 por ciento más que en mayo.

Estos son los valores de la Canasta Básica Total (CBT) y Canasta Básica Alimentaria (CBA), respectivamente, con las cuales se miden las líneas de pobreza e indigencia.

El Indice de Precios al Consumidor (IPC-Costo de Vida) registró un avance del 0,6 por ciento durante junio, con lo que acumula una suba del 4,6 ciento en el primer semestre del año, informó hoy el INDEC. El organismo oficial precisó además que los precios mayoristas avanzaron 1 punto el mes pasado y suman 6,3 entre enero y junio.

El índice -que desde el mes pasado toma como referencia un nuevo año base (abril de 2008) y mide la evolución de más de 400 productos- reflejó una evolución del 1,6 por ciento en el rubro Equipamiento y Mantenimiento del Hogar; 1,5 por ciento en Educación y 1,3 por ciento en el de Atención Médica. El rubro Alimentos y Bebidas aumentó en su conjunto un 0,7 por ciento, al tiempo que el Costo de la Canasta Básica Alimentaria (CBA) avanzó un 1,02 por ciento el mes pasado.

De esta manera, una familia con dos niños de entre 6 y 8 años requirió el mes pasado de 454,57 pesos para no caer por debajo de la línea de indigencia, tal como lo marca la Canasta Básica Alimentaria (CBA).

El registro de los precio minoristas realizado por el INDEC presentó significativas variaciones durante junio, con alzas del 1,6 por ciento en los alquileres y los porcentajes citados para Atención Médica y Educación, que fueron contrarrestado por una merma el 2,9 por ciento en el precio de los aceites y del 1,3 en las carnes.

Ayer, durante una exposición realizada ante la Comisión de Presupuesto y Agricultura del Senado, en el marco de los debates por el proyecto de ley sobre las retenciones móviles, el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, afirmó que los únicos "números reales" en cuanto a inflación son los que difunde el INDEC. "Los demás son presunciones de consultoras que vuelcan los resultados en función de quién les pague", dijo el funcionario durante su exposición, relativizando de esta forma la veracidad de las proyecciones formuladas sobre la evolución del costo de vida desde el sector privado, cuyas proyecciones marcaban una suba superior al 1 por ciento durante el mes pasado.

Por su parte, los costos mayoristas, que se siguen midiendo en base al método anterior, marcaron un incremento del 1,0 por ciento, impulsados por un alza del 0,6 en los productos primarios, del 1,2 en los elaborados, y del 0,7 en los artículos importados.

Entre los productos primarios se destacó la suba del 2,4 por ciento en los minerales no metalíferos, vinculados a la construcción, y del 1,1 en los agropecuarios. Los productos manufacturados subieron el 1,4 por ciento, con un incremento del 2,6 en Metálicos Básicos, del 2,3 en Máquinas y Aparatos Eléctricos, y del 1,0 en Alimentos y Bebidas. La energía eléctrica, que no presentó suba durante junio, lleva acumulado un incremento del 9,7 por ciento en el primer semestre del año.

En tanto, los costos de la construcción marcaron un leve avance del 0,1 puntos durante junio y 8,2 en el primer semestre. Por primera vez en varios meses, el costo de la mano de obra presentó una baja, esta vez, del 1,5 por ciento, al igual que los "Gastos Generales" que retrocedieron el 0,1. Tan sólo el costo de los materiales, con un avance del 1,5, cerró con números positivos en la medición del índice de la construcción.