No obstante el acuerdo sobre la necesidad de un paro para reiterar el reclamo de que se dé marcha atrás con esa iniciativa, los sindicatos propusieron llevar a cabo la medida de distinta manera. Ademys anunció uno de 48 horas, para el próximo miércoles y jueves, en tanto que UTE lo confirmó sólo para el jueves, día en que está previsto el tratamiento del proyecto en la Legislatura.

Néstor Di Milio, secretario adjunto de Ademys, señaló que la reunión con el funcionario "fue una parodia" de intento de acuerdo: "No es cierto que hay diálogo porque ya tiene la decisión tomada; el verdadero diálogo es cuando el proyecto se lleva a las escuelas, y no hay respuesta a eso", argumentó. Lo que los docentes proponen es que el tema de las Juntas de Clasificación se discuta en las comunidades educativas. En cambio, "con este proyecto, el gobierno quiere que en vez de que estén los mejores docentes, estén los acomodados, los amigos del poder político", dijo López, de UTE.

"Pedimos tiempo para que en diciembre y febrero, cuando no hay alumnos, los docentes podamos discutir este tema en las escuelas y en marzo elevar una propuesta. Pero -añadió- están muy apurados por sacar la ley, entre gallos y medianoche, en la última sesión del año de la Legislatura y junto con otras 100 leyes más."

Por su parte, Di Milio negó que haya habido algún acuerdo con las autoridades educativas y pidió "que el ministro sea claro cuando dice que hay diálogo porque no es cierto, los sindicatos más importantes no llegamos a ningún acuerdo". Por ello, deseó "que los legisladores piensen muy bien lo que van a hacer porque los docentes en general rechazan este proyecto".