El alcalde de Donetsk, Alexander Luianchenko, aseguró que Poroshenko le prometió que no bombardearía Donetsk. "El Ejército liberó otros lugares con ataques aéreos y artillería, pero en nuestra densamente poblada ciudad ello provocaría una catástrofe", señaló.

Por su parte, el ministro de Exteriores ruso, Serguei Lavrov, acusó al gobierno ucraniano de romper su palabra, al asegurar que la opción de instar a las milicias a rendirse nunca fue discutida en las negociaciones, aunque sí la negociación de un alto el fuego y un encuentro de ambas partes.

Mientras tanto, los insurgentes prorrusos de Lugansk informaron la toma de un jet de combate Suchoi Su-25 y la destrucción de un avión Ilyushin Il-76 y varios vehículos acorazados de las tropas del gobierno. Según las autoridades, un vehículo con civiles fue alcanzado por disparos y murieron al menos dos personas, mientras cuatro resultaron heridas.