El rector de la Universidad de Buenos Aires, Ruben Hallu, le pidió la renuncia a la rectora del Colegio Nacional de Buenos Aires, Virginia González Gass, cuyo mandato vence en 2011. Lo hizo a través de una nota en donde le solicitó que eleve una nómina de candidatos para reemplazarla. La nota ponía como plazo el miércoles 7, pero las autoridades del Colegio ignoraron la petición –la definieron como “informal”– y el Consejo Resolutivo del Buenos Aires –formado por representantes de docentes, alumnos, graduados y trabajadores– exigió que se respete el mandato de González Gass. El rectorado buscaría ahora avanzar a través del Consejo Superior de la UBA.

En las escuelas de la universidad, la designación de los rectores corre por cuenta del titular de la UBA, quien elige a partir de una terna elevada desde los propios colegios. Así fue como, en 2007, González Gass se convirtió en la primera mujer en alcanzar la dirección del Colegio fundado en 1863.

La relación entre Hallu y González Gass nunca fue buena, pero comenzó a tensarse más aún el año pasado. La carta enviada el martes 29 por Hallu no precisó las razones por las que solicitaba nuevos postulantes para dirigir el Buenos Aires. En diálogo con este diario, voceros de la UBA desgranaron una serie de cortocircuitos entre ambos. Por ejemplo, que a Hallu le hubiera agradado que González Gass le pusiera a disposición su renuncia, como hicieron los funcionarios de su gabinete a comienzos de este año, cuando él inició su segundo mandato al frente de la UBA. Más seriamente, le achacaron haber abierto nuevos cursos en el Colegio sin contar antes con la asignación presupuestaria correspondiente. Y siguieron: “Viene desatendiendo sugerencias de la Secretaría Académica, además de tener la descortesía de ni siquiera atender los llamados del rector”.

Tras la nota de Hallu, el Consejo Resolutivo del Nacional de Buenos Aires sesionó el viernes pasado y aprobó una declaración señalando que, en tanto “el término por el cual fue designada la rectora vence en mayo de 2011”, el pedido de Hallu de contar con nuevos postulantes para el 7 de julio “no responde a los tiempos requeridos”. Añadió que “el insuficiente plazo” de la convocatoria impedía que los virtuales candidatos elaboraran propuestas pedagógicas e imposibilitaba que el propio consejo analizara y seleccionara los proyectos. Lo mismo solicitó una asamblea de profesores realizada el lunes.

Consultada por Página/12, González Gass ratificó su intención de concluir su mandato. “Queremos que se respete la decisión del Consejo Resolutivo”, dijo la rectora, que hace diez días difundió un informe de gestión de 80 páginas con lo realizado en los últimos tres años. “Además –agregó–, esto sienta un precedente muy negativo, es la primera vez en la historia que se le pide la renuncia a un rector del Colegio.” En el equipo de González Gass desestimaron los argumentos en su contra esgrimidos desde la universidad. Admitieron que algunos cursos vespertinos fueron abiertos antes de que se aprobaran los fondos necesarios, pero aseguraron que eso ocurrió porque en la UBA “cajonearon” los expedientes. Y agregaron otro factor de discordia entre el Colegio y el rectorado: el eterno conflicto por el campo de deportes del Nacional, un terreno que la comunidad de la escuela viene defendiendo desde 1989 ante los proyectos inmobiliarios de la Corporación Puerto Madero.

Las diferencias entre Hallu y González Gass llegarían en los próximos días al Consejo Superior de la UBA. Los sectores afines al rector podrían promover una limitación de las funciones de González Gass en el Colegio. En ese contexto, ya comenzaron a circular nombres de virtuales postulantes. Como el del radical Agustín Zbar, profesor de Derecho y ex procurador de la ciudad. O el del profesor de Filosofía y Psicología Oscar de Gyldenfeldt, ligado al espacio de intelectuales y artistas Carta Abierta. Hace tres años también se postularon los profesores Pablo Jacovkis y Sergio Di Gioia, además de Zbar y González Gass.