El luto enmarcó la primera jornada competitiva de la edición 2010 del Dakar, que ayer llegó a Córdoba y hoy cumplirá la segunda etapa con destino a La Rioja. Una mujer murió luego de ser embestida por uno de los competidores del rally y otras seis personas fueron heridas. La víctima fue una mujer de 28 años, es la segunda desde que el Dakar compite en Sudamérica, luego del fallecimiento del motociclista francés Pascal Terry en 2009, y la número 55 en 32 ediciones del Dakar, que se realiza desde 1979.

La camioneta Desert Warrior nº 418 del alemán Mirco Schultis se salió del camino cuando intentaba superar a otro competidor, a unos 1500 metros antes de Alpa Corral, en las serranías cordobesas, unos 75 kilómetros después de iniciada la prueba especial de la etapa. El polvo en suspensión contribuyó al despiste y la máquina se precipitó fuera del camino, arrollando a varios espectadores que se encontraban en una zona presumiblemente no habilitada para ver la competencia. Eran las 13.45 de ayer.

Una joven de 28 años, identificada como Natalia Sonia Gallardo, domiciliada en Alpa Corral, sufrió varios paros cardiorrespiratorios luego de ser atropellada y murió en el Hospital de Urgencias, adonde había sido trasladada en un helicóptero sanitario de la prueba, que tardó alrededor de 20 minutos en llegar al lugar del accidente. “La joven sufrió traumatismos graves de cráneo, abdomen y pelvis y padeció dos paros cardíacos en el traslado”, informó el doctor Norberto Brusa, del Hospital de Urgencias. El tercer paro, en el centro asistencial, fue trágico. Al hospital también fue trasladado otro herido, de General Roca, con fractura de tibia y peroné izquierdos. Otras cinco personas, entre ellas un niño de dos años, debieron ser atendidas a causa de las heridas sufridas. Dos hombres mayores, uno de ellos un fotógrafo brasileño, fueron derivados en ambulancia a una clínica de Río Cuarto.

Testigos del accidente confirmaron que las personas atropelladas estaban ubicadas en un lugar prohibido para espectadores, en la parte externa de una curva. El portavoz del rally, Nicolás Vega, había advertido pocas horas antes del accidente que en la provincia de Córdoba se había dispuesto un operativo de seguridad más estricto debido a que el fervor del público en este distrito, amante del automovilismo, podría llevar a la gente a apostarse en zonas peligrosas. “La organización y las autoridades llaman de nuevo a la población a tomar gran prudencia y a respetar las zonas públicas”, que serán 57 durante las catorce etapas que conforman el recorrido del Rally, insistieron los organizadores.

El accidente no cayó nada bien entre los responsables de la organización, la empresa francesa ASO, cuya responsabilidad en la muerte del motociclista Terry un año antes todavía no ha sido dilucidada. La camioneta 418 arribó al final de etapa, en Córdoba, y se clasificó 123ª entre 126 autos, pero Schultis decidió no continuar en la prueba, conmovido por el accidente y la tragedia.

Con esta muerte son ya 55 las personas que han perdido la vida desde el inicio del historial de la prueba, siendo la primera víctima el motociclista Patrick Dodin, que perdió la vida en 1979 tras salirse del camino en Agadés (Níger). Los años más luctuosos fueron 1986, edición en la que murieron siete personas, entre ellas el “alma mater” de la prueba, Thierry Sabine, y 1988, en el que fallecieron seis.