River había arrancado tranquilo, confiado quizá en la diferencia de categoría con los jujeños, pero no terminaba de acomodarse en la cancha cuando, a los 9 minutos, Luna dominó la pelota en el mediocampo y tocó para Balvorín, quien picó apenas adelantado a espaldas de Arano y, mano a mano con Carrizo, la picó al segundo palo por encima del arquero para poner a Gimnasia en ventaja y cambiar el desarrollo del partido.

Un cabezazo de Britos en la puerta del área chica, a los 18, terminó de confirmarle al arquero de River que su defensa, con la novedad de Almeyda con posición de seis, no estaba sólida y que debía gritarles a sus compañeros para que aumenten la atención y no pierdan de vista a los jugadores del equipo de Pancho Ferraro.

La primera de River fue un tiro libre en la puerta del área, luego de que el arquero derribara a Funes Mori en la medialuna tras una muy buena jugada colectiva del equipo de Angel Cappa. Ejecutó Buonanotte, toque atrás, jugada preparada, fue un blef. Caía aguanieve en la noche de Salta, y River no encontraba el camino ni el funcionamiento, más allá de algunos pequeños destellos de Buonanotte, una trepada interesante de Arano con remate incluido y un tirito frontal de Acevedo a las manos de Bangardino.

Para el segundo tiempo Gimnasia apretó sus líneas y buscó cerrarle los espacios a River, que seguía plasmando su juego en el plano de las intenciones. Los jujeños, de contra, pudieron ampliar la ventaja, pero Carrizo salvó con el pie un buen remate de Carretero.

El mejor ataque de River lo tuvo Buonanotte, a los 60 minutos, tras un desborde dentro del área, aunque falló por poco en la definición. Pereyra le cambió la cara al ataque de River, que crecía a medida que lograba controlar la pelota en el mediocampo. Gimnasia apostaba a liquidarlo de contra y casi lo logra Romero al estrellar un remate contra el palo derecho de Carrizo, y sobre el final se lo perdió Di Vanni.

Los últimos minutos no hicieron más que acentuar las dificultades de River. Sin embargo, a los 88, tras una falla defensiva apareció Funes Mori y con un zapatazo anotó la igualdad, que apenas le arrancó una sonrisa a Cappa.