San Lorenzo le ganó ayer a Racing la final del Torneo de Invierno y se adjudicó el certamen, que se disputó en la cancha del equipo que dirige Miguel Angel Russo. Tras haber igualado 1-1 al cabo de los noventa minutos, el conjunto visitante se impuso en la definición por penales, por 4-3. El delantero uruguayo Emiliano Alfaro abrió el marcador para San Lorenzo y el atacante Pablo Lugüercio igualó para Racing, pero falló el penal definitivo.

En un encuentro que fue de mayor a menor, San Lorenzo mostró más solidez y pudo haber liquidado la cuestión en el primer tiempo. A los 17 minutos, Alfaro clavó un disparo en el ángulo, desde 30 metros, que hizo inerte la volada del arquero racinguista. Con la cancha inclinada a su favor, el equipo de Ramón Díaz tuvo chances claras para aumentar la ventaja. El lateral José San Román estrelló un remate en el palo, el volante convertido en puntero Fabián Bordagaray inquietó al arquero local con un remate que Fernández contuvo en dos tiempos, y San Román tuvo un cabezazo apenas desviado.

Cuando Racing no conseguía inquietar el arco de Pablo Migliore, llegó al empate en una acción confusa. Patricio Toranzo envió un centro desde la derecha, la pelota se desvió en el colombiano Giovanni Moreno, hubo un rebote y Lugüercio aprovechó para definir ante la estática mirada de Migliore. Antes de eso, Racing sólo había tenido un remate de Toranzo que el arquero de San Lorenzo contuvo con dificultad.

En la segunda mitad, el partido perdió el ritmo vertiginoso de los primeros 45 minutos y se volvió mucho más áspero. Racing tuvo su cuarto de hora y mostró mejores condiciones, con un derechazo cruzado apenas desviado de Hauche y una jugada individual de Moreno que, con un remate a media distancia, exigió a Migliore.

La paridad obligó a definir por penales. Sebastián Luna le dio la ventaja a San Lorenzo y Toranzo desvió el primero de Racing. En lo sucesivo, convirtieron para el equipo visitante Cristian Tula, Guillermo Pereyra y Nelson Benítez, mientras que Lucas Aveldaño, Lucas Castromán y Moreno hicieron lo propio para el local. El zaguero Jonathan Bottinelli tuvo la chance de liquidar la historia en el quinto penal, pero Fernández se lo contuvo y le dio una vida más a Racing. Cuando parecía que la serie podía extenderse, Migliore le adivinó la intención a Lugüercio y le dio la merecida victoria a San Lorenzo, que fue más que su rival en el balance global.