Vacío de juego y sin individualidades que lo pudiesen rescatar en los peores momentos del partido, San Lorenzo cayó 2-0 en su visita a Atlético de Rafaela, que de esta manera se recuperó de la eliminación en las semifinales de la Copa Argentina a manos de Huracán.

Con excepción de los primeros cinco minutos del encuentro, el equipo dirigido por Edgardo Bauza no estuvo en el partido en ningún momento, y eso fue determinante para que Rafaela se diera cuenta de que podía quedarse con la victoria. El conjunto santafesino fue de menor a mayor y a su falta de claridad e ideas las compensó con la ambición y la efectividad de Lucas Albertengo, el autor de los dos goles.

La primera mitad resultó discreta, sin ocasiones de peligro frente a los arcos. Tanto Rafaela como San Lorenzo esperaron el error del rival, algo que no se produjo en ese lapso del juego. Por eso, cuando decidieron ir al ataque, mostraron mucha lentitud y falta de peso en el área. El gran cambio se dio en la segunda etapa cuando Rafaela se dio cuenta de que podía aspirar a más. Se adelantó en el campo, presionó en la mitad de la cancha y forzó más situaciones en los últimos metros. En ese sentido, el equipo de Roberto Sensini eligió el sector izquierdo para desbordar a San Lorenzo, gracias al tándem que conformaban Juan Eluchans y Federico González.

Así llegó el primer tanto, cuando González corrió de la punta al medio y cedió para Albertengo, que se acomodó y venció a Torrico con un derechazo bajo. Después del gol, Bauza movió fichas, mandó a la cancha a Nicolás Blandi para acompañar en ataque a Martín Cauteruccio, y a Héctor Villalba para oxigenar la mitad de la cancha, pero no tuvo éxito y su equipo siguió sin mostrar reacción.

En ese contexto y con el juego dominado, Rafaela llegó al segundo tanto, otra vez por intermedio de Albertengo, que definió cruzado ante la salida del arquero. De esa forma se cerró un partido que dejó a San Lorenzo con mucha preocupación, teniendo en cuenta que sigue deambulando en el torneo y no encuentra el funcionamiento, con el Mundial de Clubes cada vez más cerca.