DEPORTES › ARGENTINA SE IMPUSO 2-1 A BOLIVIA Y SIGUE EN LA PUNTA DE LAS ELIMINATORIAS
Sobró altura para ganar y seguir arriba
La Selección de Pekerman mostró inteligencia y personalidad para sostener el desarrollo, sobreponerse al tanto de Castillo en el arranque del segundo tiempo y dar vuelta el marcador con goles de Figueroa y Galletti. Se logró un triunfo en La Paz luego de 32 años.
La practicidad, el orden y la personalidad de la Selección Argentina se hicieron presentes en el estadio Hernando Siles para que el equipo de José Pekerman lograra una estupenda victoria 2-1 ante Bolivia en la altura de La Paz. Con inteligencia táctica se encargó de minimizar los efectos de los 3600 metros sobre el nivel del mar y se trajo una victoria que lo consolida en la punta de las Eliminatorias y que lo deja muy cerca de la clasificación para el Mundial de Alemania.
La apuesta de Pekerman resultó redonda. Es que con jugadores jóvenes, livianos y rápidos, el equipo se apoyó en un interesante planteo colectivo para poder sortear un compromiso a priori muy complicado –no se ganaba en La Paz desde 1973–, mientras los titulares frente a Colombia se quedaron descansando en Buenos Aires. De entrada quedó claro que la premisa de Argentina era sostener la pelota el mayor tiempo posible, sin buscar demasiada profundidad y tratando de evitar desgastes innecesarios. Y con esa idea logró pasar un primer tiempo sin muchos sobresaltos frente al arco de Abbondanzieri, más allá de una entrada de Castillo que tapó el arquero y otra acción del delantero que terminó con un remate en el travesaño, aunque la jugada estaba anulada por mano.
Solventado el aspecto defensivo, de a poco Argentina empezó a soltarse. Con la presencia que impuso Cambiasso en el medio, bien secundado por Duscher, el conjunto visitante se fue adueñando del desarrollo. Y tuvo varias ocasiones para convertir, sobre todo en los pies de Galletti, que mostró un gran despliegue, aunque no siempre eligió bien la opción para definir. El delantero perdió el gol tras un pase de Duscher y luego reventó el travesaño en otra entrada desde la derecha. También pudo convertir el volante de La Coruña tras una buena maniobra de conjunto, pero su remate se fue cerca del palo.
Tras ese buen primer tiempo, Argentina recibió un golpe durísimo en el arranque del segundo, pero supo sobreponerse. Platini Sánchez envió un centro pasado desde la derecha y Castillo le ganó por arriba a Cufré para marcar el primer tanto del partido. Allí pareció que el planteo de Argentina se caía, pero en el peor momento del juego apareció la fortuna que había faltado en la primera etapa. Es que en seis minutos pudo dar vuelta el partido, pese a que ya no mandaba en el desarrollo. Primero fue a través de un tiro libre de Maxi Rodríguez, que Figueroa cabeceó al gol con la complicidad del fondo boliviano. Y luego llegó el desnivel con una corrida de Galletti, que resolvió al primer palo del arquero, tras una excelente habilitación de Cambiasso.
Allí Argentina volvió a tener el dominio psicológico del encuentro, aunque la evidente merma física permitió que Bolivia se acercara mediante pelotazos cruzados y centros. La sobria tarea de Abbondanzieri y la seguridad de la defensa se encargaron de sostener el triunfo, que se empezó a construir con inteligencia táctica y se terminó de consumar con un gran trabajo colectivo.