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La jefa de Estado y la máxima autoridad monetaria del país volvieron a defender el uso de reservas internacionales para pagar deuda externa. Cristina Fernández y Mercedes Marcó del Pont lamentaron la ausencia de avances en materia de regulación y rediseño de la arquitectura financiera a nivel global, pero destacaron la fortaleza relativa que demostraron los países en desarrollo para enfrentar la crisis.

“Hubo una gran resistencia a esa estrategia diciendo que se venía el mundo abajo. En cambio, generamos certidumbre y, si bien ya pagamos alrededor de 4000 millones de dólares, hoy tenemos más reservas que a principios de año”, apuntó CFK durante su intervención en las Jornadas Monetarias del Central. El debate por el uso de las reservas concluyó con el desplazamiento del ex titular de la BCRA Martín Redrado y el desembarco de Marcó del Pont. Para la Presidenta, el uso de una porción del stock de divisas en poder del Central “fue sumamente exitosa frente a la muletilla que Argentina no iba a poder hacerse cargo de sus compromisos externos. Con esta muletilla permanente de algunos sectores se apuntaba a la caída del valor los títulos públicos”, consideró.

La mandataria, sin aludir a los cuestionamientos a la labor del Indec –una porción significativa de los títulos públicos ajustan su valor de acuerdo con la evolución del IPC–, sostuvo que “generamos certidumbre y, además, pudimos destinar recursos que teníamos asignados al pago de compromisos externos, precisamente, a sostener la demanda agregada, evitando que caigan el PIB y los niveles de empleo”.

“Espero que no se vuelva a la ‘normalidad’ que significó el modelo basado en la valorización financiera y en la falta de control de los grandes grupos de capital”, sostuvo CFK, quien hizo referencia a las tensiones que existen en el seno del G-20 sobre las políticas necesarias para enfrentar los desbalances actuales.

La titular del Central cuestionó, en tanto, que a medida que algunas regiones muestran signos de recuperación económica, se debilita el reclamo global para realizar reformas estructurales de la arquitectura financiera internacional. Marcó del Pont contrastó el escenario que atraviesan las economías centrales con el de los países en desarrollo y Argentina: “Tenemos la clara certidumbre que atravesamos esta crisis mundial sin haber enfrentado las crisis cíclicas del sector externo, o la destrucción masiva de puestos de trabajo. Por el contrario, se sostuvieron los niveles de actividad sin graves de-

sequilibrios macroeconómicos”.