El jueves, el presidente Kirchner recibió la información del Indec sobre la desocupación del cuarto trimestre de 2006. La cifra supera las expectativas del más optimista. En el último trimestre del año pasado, la desocupación cayó al 8,6 por ciento, frente al 10,2 por ciento del tercer trimestre de 2006, y el 10,1 por ciento del cuarto trimestre de 2005.

Igual, difícilmente se pueda decir que el objetivo de bajar la desocupación a “un dígito” está cumplido. Ese dato del Indec considera como ocupados a los planes Jefes de Hogar para desocupados. Si se los considerara como lo que son, desempleados, entonces la tasa estaría todavía por arriba del 10 por ciento: 10,5 por ciento para ser más precisos. La difusión oficial del índice de desocupación está prevista en el cronograma del Indec recién para el próximo 28 de febrero.

En el suplemento Cash el lector encontrará un informe especial sobre los polémicos números del Indec. Entre otras cosas, allí se cuenta que el Indice de Precios al Consumidor (IPC) de enero cerró en 1,1 por ciento no sólo porque se cambió la metodología de medición de las prepagas y el turismo. Además, se contabilizó un aumento de precios de la lechuga inferior al que registraron los encuestadores del organismo, adoptándose una nueva regla para computar las subas de precios de los productos estacionales (frutas y verduras).