Israel aseguró ayer que si el Ejército de su país invade Gaza, en el marco de la operación Pilar Defensivo, será para “ir hasta el final”. El Estado hebreo agradeció el apoyo de Estados Unidos y los países europeos, mientras que la gente salió a manifestarse contra las acciones militares.

“Estamos preparados para una operación terrestre a gran escala, si resulta necesaria, pero cabe destacar que si el Ejército entra en Gaza no puede parar a la mitad, tiene que ir hasta el final”, declaró el ministro de Exteriores, Avigdor Lieberman, en Kiriat Motskin, cerca de Haifa, en el norte de Israel. El jefe de la diplomacia israelí lamentó que en la última invasión de Gaza, hace cuatro años, durante la operación Plomo Fundido, Israel pagó un alto precio en términos de opinión mundial por la muerte de 1400 palestinos, en su mayoría civiles, y sin embargo no logró su objetivo. En un extenso comunicado difundido ayer, el Estado de Israel fijó su posición ante los últimos acontecimientos, explicando que el estado hebreo está ejerciendo su legítimo y reconocido derecho a la legítima defensa, al proteger a los ciudadanos del sur del país. Tras aclarar que no hubo ninguna presencia israelí en la Franja de Gaza desde 2005, el comunicado expresó que ningún país en el mundo aceptaría con ecuanimidad una amenaza continua y mortal que altere la vida cotidiana de sus ciudadanos. “Más de un millón de israelíes están siendo atacados por los cohetes de Hamas. Esa es una realidad que ningún país puede soportar”, sostuvo. Y agradeció el apoyo de la comunidad internacional por sus acciones realizadas en defensa propia contra “el terrorismo que emana de Gaza”.

El presidente estadounidense, Barack Obama, expresó el viernes su profundo apoyo al derecho de Israel a defenderse, en una conversación telefónica sobre el conflicto en Gaza con el primer ministro Benjamin Netanyahu, informó la Casa Blanca. También países como Canadá, Australia, Reino Unido, Francia y la Unión Europea declararon su apoyo a la autodefensa de Israel.

En medio de las declaraciones a favor del país hebreo centenares de israelíes protestaron en la plaza Habima, de Tel Aviv, contra las acciones militares. Entre los carteles que levantaban había uno muy significativo, que pedía en inglés una zona de exclusión aérea para Palestina, en referencia a las que Occidente impuso en Libia y desea tener en Siria. Además, hubo manifestaciones en toda Cisjordania y en Jerusalén. En Londres, cientos de personas se manifestaron enfrente de la Embajada de Israel en solidaridad con los palestinos y para protestar por la posición adoptada por el gobierno británico en la actual crisis palestino-israelí.