El comentarista chavista Mario Silva deberá prestar declaración en los próximos días y en calidad de testigo ante el Ministerio Público de Venezuela acerca de la conversación que mantuvo con un agente de inteligencia cubano. El 20 de mayo pasado, un grupo de diputados opositores difundió una grabación de una hora y cuatro minutos en la que supuestamente hablan Silva y el jefe del servicio de inteligencia cubano G2 en Venezuela, teniente coronel Aramís Palacio. En la conversación, Silva denuncia presuntos hechos de corrupción, pugnas dentro de sectores oficialistas y hasta una conspiración militar contra el presidente Nicolás Maduro, e imputa por ellos a varias figuras del partido gobernante. “Silva debe concurrir en los próximos días al Ministerio Público para ser entrevistado por la fiscal (a cargo de la investigación, Gineira Rodríguez) en torno de los hechos que aparecen en las denuncias”, anunció ayer la fiscal general de la República, Luisa Ortega Díaz. Y afirmó también que se aplicaron algunas diligencias de investigación como, por ejemplo, la experticia (pericia) de coherencia técnica que debe hacérsele a este audio.